Multado con 18.000 euros un empresario que contrató a rumanos sin papeles

El Juzgado Contencioso Administrativo número 2 de Badajoz ha confirmado la multa impuesta por la Subdelegación del Gobierno de Extremadura a una empresa que empleó a tres trabajadores rumanos que no tenían permiso de trabajo. Los tres inmigrantes estaban recogiendo pimientos en una finca de Valdelacalzada el 2 de agosto de 2006.

La sentencia argumenta que en la fecha en que se produjo la infracción, los rumanos todavía necesitaban permiso para poder trabajar en España. Ha sido a partir del 1 de enero de 2009 cuando se ha establecido que ya no necesitan ese permiso.

La juez estima que el empresario que tenía ocupados en su finca a los tres rumanos era perfectamente consciente de que carecían del pertinente permiso, por lo que no puede negar su culpabilidad.

La sentencia califica los hechos como graves y desestima todas las alegaciones que presentó el empresario en contra de la multa. La sentencia es firme.

El empleo de trabajadores inmigrantes sin permiso está penado por la ley española con multas de 6.000 euros por cada persona. Como en este caso eran tres los empleados que trabajaban irregularmente la sanción asciende a 18.000 euros.