El rincón más dulce, a dos pasos de la Plaza Alta

Desde su puesto, en las inmediaciones del mercado medieval, Mamá Bombón tienta a los transeúntes con pequeñas delicias que recuerdan a aquellas que elaboraba el personaje que interpreta Juliette Binoche en 'Chocolat', la cinta de Lasse Hallström.

Magdalenas con guindas o gominolas y bombones con sabores y formas caprichosas llamaban la atención de los viandantes que accedían a la Plaza Alta por la calle Moreno Zancudo.

Aunque por su estética, su tez clara, sus inmensos ojos azules y su cabello anaranjado pueda parecer que la artífice de tantos productos que invitan al dulce pecado proviene de tierras lejanas, lo cierto es que Gloria Domínguez, las manos y el corazón del invento, es una pacense de pro que retorna a la ciudad que la vio nacer después de más de 10 años en Inglaterra.

«Me fui en 1996 y desde entonces he estado formándome y estudiando allí y en Francia, especializándome en chocolate y en pastelería», dice la joven, que elabora todos los chocolates en su propia casa con materia prima belga.

De momento el boca a boca le va bien y empieza a recibir encargos de particulares, cafeterías y restaurantes que ella misma embala y entrega.

«Las recetas son mías aunque también utilizo libros. En Inglaterra trabajaba con un francés y hacíamos chocolates para la familia real inglesa. Esas recetas y algunas de las suyas las uso ahora. Otras me las invento. El cliente me da ideas e investigo», confiesa Gloria, que se está formando a nivel empresarial para montar su propia tienda.

De momento ha salido airosa de la XII edición de Almossassa, su primer contacto con el gran público, y repetirá en el mismo sitio los primeros sábados de cada mes.