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Domingo, 8 de noviembre 2009, 01:16
El CB Illescas, a base de trabajar mucho la defensa y el buen hacer en ataque de Sanders y Biyombo, consiguió derrotar al Plasencia-Extremadura (68-81), rompiendo la buena racha de tres victorias consecutivas que acumulaban los placentinos. El partido fue trepidante y hasta bien entrado el último cuarto estuvo en un pañuelo. Una falta descalificante que conllevó la expulsión de Barceló a falta de poco más de tres minutos para el final, certificó el triunfo y la alegría de medio centenar de illescanos que se desplazaron y salieron satisfechos tanto del juego como del resultado de su equipo.
El Plasencia-Extremadura comenzó el choque muy motivado y con buenos movimientos en el poste bajo. El peso anotador lo llevó Almazán y su combinado obtuvo la mejor racha anotadora del encuentro (10-0). A partir de ese momento, Illescas no se dejó sorprender más y poco a poco comenzó a exhibir agresividad a la hora de defender y de atacar. Con Almazán en el banquillo por dos faltas personales, el partido comenzó a convertirse factible para Nacho Guigou en la dirección y Bismack Biyombo, que se mostró muy superior debajo de los tableros e Illescas fue limando diferencias hasta llegar al final del primer cuarto con una ligera desventaja de 3 (19-16).
En el segundo fragmento, Sergio Jiménez apostó por las rotaciones e introdujo al norteamericano Thomas Sanders, al checo Krauss y al veterano base Simón, la apuesta, poco a poco, fue ofreciendo resultado. Un parcial a favor de los visitantes de 0-11 originó que llegaran a crecer, e incluso, al descanso, se fueron por delante 27-32. En esta segunda función de poco sirvió la garra de Chipi Díaz. Plasencia-Extremadura ofreció su peor versión, especialmente en jugadas de ataque, donde la intensidad defensiva de Illescas neutralizó sus movimientos. Si a ello le añadimos que Barceló no tuvo su mejor día y que el resto de compañeros no hicieron una buena selección de lanzamientos a canastas, se comprende que sólo pudieron llegar a anotar 8 puntos.
Intento de despegue
En la reanudación, los castellanos intentaron despegar pero la buena mano de un espléndido Sekulic en ataque y un parcial postrero de 7-0 para los locales volvieron a poner de nuevo por delante a los jerteños (43-40). Llegaron momentos de relativa igualdad pero dos nuevas canastas de Sanders dieron la vuelta al electrónico (43-46).
Illescas, que había cerrado el tercer cuarto con cierta ventaja hizo grande la brecha. Lucas Krauss, de nuevo, lanzó a los suyos y con un contundente parcial les llevó hasta la máxima ventaja (43-59). Lo mejor de los placentinos en los últimos cinco minutos fue que no perdieron la concentración y a pesar de ir por debajo siguieron jugando para intentar ganar. El punto de ruptura del choque fue una decisión de dudosa apreciación arbitral, que trajo como consecuencia el comportamiento personal antideportivo de Jónathan Barceló. El catalán se hartó de protestar y fue expulsado. A partir de ese instante, el equipo que dirige el joven Sergio Jiménez afrontó un final relativamente cómodo y a Plasencia-Extremadura no le quedó otro remedio que rendirse ante el buen juego exhibido por su rival.
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