El Escubal se conjura para hacer frente al Cangas

La plantilla y los técnicos del Escubal Badajoz quieren regresar cuanto antes a la senda de buen juego y resultados que seguían antes del parón por las vacaciones navideñas y se han conjurado para sacar adelante el partido que disputará este sábado (18.00 horas) en el pabellón de La Granadilla contra el Frigoríficos del Morrazo Cangas. Atrás ha quedado la abultada derrota de Barcelona de la semana pasada y el representante extremeño en la División de Honor Plata del balonmano español, que ha analizado mucho los pormenores de lo ocurrido, quiere empezar a ver la luz en un mes de enero que tras este exigente choque se mostrará algo más suave en lo que al calendario se refiere.

La plantilla ha querido pasar página cuanto antes para centrarse en la preparación del envite ante el cuadro gallego, otro de los gallitos de la categoría. El equipo, informa el club, ha entrenado durante toda la semana a un gran nivel y quienes han visto los entrenamientos cuentan que todos lo jugadores han estado especialmente concentrados y minuciosos en los ejercicios planteados por Raúl Caballero para que no vuelva a suceder lo ocurrido ante el filial blaugrana.

De cara al compromiso contra el Frigoríficos, un equipo con pasado en Asobal, en puesto de playoff de ascenso tras diez victorias, un empate y cuatro derrotas, los extremeños saben que la diferencia en la tabla y en los puntos conseguidos por unos y otros es importante, pero tienen muchas ganas de sacarse la espina y saldrán especialmente motivados. Pese a lo complicado del rival nadie en el cuadro pacense se siente inferior al Cangas y querrán demostrarlo en La Granadilla, donde deben enganchar con su esfuerzo a una afición a la que necesitan en estos momentos. Los jugadores quieren verse arropados por su público y agradecen gestos como los de la Unión del Balonmano Pacense y del Tierra de Barros de Almendralejo, que les acompañarán tras retrasar el horario de su encuentro regional para animar a sus compañeros.

Una vez marcado el claro objetivo, el Escubal va a afrontar el partido sin dudas. Si los extremeños no han conseguido hasta la fecha puntuar fuera esta temporada deben impedir por todos los medios que el resto de rivales saquen resultados positivos en Badajoz. Una de sus asignaturas pendientes durante un tramo de campeonato fue la falta de continuidad en el juego durante los sesenta minutos, alternando momentos buenos en casi todos los partidos con lagunas que le han penalizado en exceso, especialmente en las segundas partes, por lo que se antoja fundamental construir los cimientos de sucesivos triunfos sobre la base de mantener un buen nivel defensivo, algo que ya se empezó a lograr en los últimos partidos de 2011. Para superar al Cangas, el Escubal se armará de paciencia tanto en ataque como en defensa y no bajará la guardia ni tan siquiera cuando tenga el marcador de cara. Esa será la mejor fórmula para encarar un partido que puede catapultar a los pacenses lejos del peligro del descenso.

Pridat, lesionado

Los únicos contratiempos para Raúl Caballero a la hora de preparar el partido han sido la lesión del alemán Benjamín Pridat, que se retiró del entrenamiento del miércoles debido a un fuerte golpe en el costado que le ha impedido entrenar más el resto de la semana, y las molestias que sigue arrastrando Edu Filella en el aductor, que le obligan a realizar un trabajo específico para recuperarse. El resto de la plantilla está en perfectas condiciones para medirse al Cangas.

En el partido de la primera vuelta, y pese a terminar cayendo por 30 goles a 19 debido a las circunstancias -de sobra conocidas- con las que inició la temporada, el Escubal Badajoz consiguió dejar grandes sensaciones tras llegar vivo al descanso, perdiendo por solo un gol (15-14) y apuntando lo que con el paso de las jornadas ha certificado: que su nivel competitivo iría considerablemente en aumento con más efectivos y más compenetración entre los mismos.

En dicho encuentro, celebrado en el pabellón de O Gatañal los locales lucieron sus habituales puntos fuertes: la unidad, la intensidad defensiva y la velocidad en las transiciones, con jugadores de la importancia de Dimitriy Chystabayeu, los hermanos Soliño o el central David García. Se trata de un grupo solvente, equilibrado y con pocas fisuras, será cuestión de encontrárselas cuando los colegiados García Sánchez y Murillo Castro decreten el comienzo del encuentro.