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EFE
Domingo, 20 de octubre 2013, 15:17
La Policía Local de Plasencia ha advertido a los dueños de los puestos de los mercadillos de los martes que los agentes serán inflexibles a la hora de sancionar a aquellos padres que "permitan" de forma reiterada el absentismo escolar de sus hijos.
Desde el inicio del curso escolar, en la capital del Jerte se vienen realizando controles al mercado semanal del martes al objeto de comprobar la afluencia de menores en el lugar de celebración del mercadillo y adyacentes durante el horario lectivo.
El trabajo se desarrolla de paisano por el agente del Grupo de Menores y Familia (Sefama) y por los "agentes tutores", ya que estos facilitan de manera muy rápida la localización del centro al cual pertenecen los menores que puedan encontrarse en el mercadillo.
Según ha informado a Efe el intendente de la Policía Local, Enrique Cenalmor, desde que comenzó el curso, la Policía Local ha detectado tres casos de absentismo en el mercado.
En uno de ellos, el menor alegó que venía del médico con una hermana mayor porque le habían quitado una escayola y que habían advertido al colegio de su falta y que de todas maneras lo justificarían.
La Policía Local solicitó al colegio informe sobre este menor y este informa, que ni previamente avisaron de la falta, ni tampoco la justificaron a posteriori.
El segundo caso tiene como protagonista a una menor de nacionalidad portuguesa, la cual se encontraba de paso por la ciudad con sus padres, a quienes se les informó de las obligaciones legales en España, en lo referente a los menores y su escolarización.
El último caso es el de un menor de cinco años, al cual se le localizó, fuera del alcance visual de sus padres, fumando y con un mechero en sus manos.
En este caso, la Policía Local comunicó al padre el problema, asesorando al mismo, en el sentido de que debería llevar a su hijo a las aulas de infantil para que su integración en el sistema educativo sea el idóneo.
"El padre manifestó que no quiere que su hijo vaya al colegio y que de ir será cuando sea obligatorio y que ya lo vería y valoraría él", ha explicado el intendente.
Se identificó al padre y se notificó como situación de posible riesgo del menor, tanto a los Servicios Sociales de Base, como al mediador del Programa de Minorías Étnicas.
"El control que llevamos a cabo sobre la presencia de menores en el mercadillo es muy estricto y conocido por los comerciantes y estos saben que no vamos a ceder en ello", ha destacado el mando policial.
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