La compañía destaca la complejidad de la avería antes de decir una causa exacta

No ha sido cosa de retirar el centro de reparto e instalar otro nuevo, sino de sustituir uno a uno todos los elementos dañados por la avería eléctrica. Iberdrola insiste en la complejidad del incidente que se produjo en el transformador ubicado en el paseo de Cánovas, cuyo fallo eléctrico provocó el lunes que 9.500 usuarios de la zona centro quedaran sin red. Y es que en este centro de reparto van conectadas numerosas líneas, de ahí que afectara a tantos clientes y que la reparación no se haya podido llevar a cabo de manera completa ni en el mismo momento ni tampoco un día después.

Como consecuencia de ello, la compañía eléctrica tampoco pudo detallar a lo largo de ayer las causas del incidente, que generó una intensa columna de humo desde el transformador, obligó a delimitar la zona y cercar el quiosco de flores y requirió la presencia de bomberos, Policía Local y Policía Nacional. Tan sólo apuntó, a través de su gabinete, que el incidente se ha registrado en el interior del centro de reparto y que se ha descartado una sobrecarga en la red como motivo.

La prioridad de la compañía eléctrica ha sido devolver el suministro lo antes posible a los usuarios afectados. A la media hora, ya habían recuperado la red eléctrica 7.000 abonados. Algo más de dos horas después del incidente, a eso de las diez y media de la noche, tan sólo restaban 240 usuarios sin luz, que no recuperaron el suministro hasta la una y media de la madrugada a través de grupos electrógenos.

Los trabajos de ayer

En segundo lugar, las acciones de la compañía se han encaminado a prescindir de los grupos electrógenos y conectar a todos los usuarios a la red mediante el centro de reparto. Esta tarea se realizó durante la jornada de ayer.

Cuatro técnicos comenzaron por la mañana a arreglar la avería con dos objetivos: el primero, desconectar los grupos electrógenos y conectar a los clientes que dependen directamente de este transformador -240 abonados- a la red eléctrica. Se prescinde de esta manera de alargar la solución de emergencia, la de los grupos electrógenos, que permitieron que estos clientes de Iberdrola tuvieran luz desde la madrugada hasta el día de ayer.

En segundo lugar, los técnicos también comenzaron a arreglar y sustituir algunos de los muchos elementos que han resultado dañados del transformador.

La compañía informó por la mañana a estos abonados de que a lo largo de la jornada se produciría un pequeño corte de luz para realizar el intercambio y recuperar el suministro directamente desde el transformador del paseo.

Sobre las tres de la tarde, los técnicos de Iberdrola procedían al cambio, para lo que requirieron la presencia de los agentes de la Policía Local para regular el tráfico rodado. Por unos instantes, la situación que se vivió el lunes a partir de las siete de la tarde en la zona centro se repitió en cierta manera, con semáforos apagados y peatones que cruzan los pasos de cebra cuando ven la oportunidad. Una vez conectados al transformador del paseo de Cánovas, los operarios cerraron de nuevo el conducto. Pero esto no quiere decir que ya se haya arreglado completamente la avería.

Iberdrola asegura que los operarios tendrán que volver a la zona para arreglar algunos elementos que aún están dañados del transformador. Al parecer, una parte del centro de recepción está más perjudicada mientras que otra han resultado menos dañada. No se sabe, a este respecto, cuánto se extenderán los trabajos de reparación ni cuándo se podrá saber con precisión cuál fue la causa del incidente.