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EFE
Sábado, 25 de enero 2014, 12:38
La Audiencia Provincial de Badajoz ha condenado a una empresa de fabricación de cal a indemnizar a otra con 342.000 euros por los perjuicios causados al quedarse con una de sus maquinarias, así como condenar a su representante a tres años de prisión.
La Audiencia de Badajoz considera al representante de la entidad Grupo Antonio Mújica culpable de un delito de apropiación indebida y además de a la pena privativa de libertad y al pago de la indemnización le condena a pagar una multa de diez meses a razón de 12 euros al día.
Los hechos ocurrieron en mayo de 2010 cuando la mercantil Capiexsa, dedicada a la fabricación de cal, para pagar una deuda concertada por una empresa de su grupo cedió en subarriendo a la entidad condenada un molino impactor valorado en casi 100.000 euros.
El subarriendo se pactó por cinco meses, pudiendo optar a la compra del mismo o devolverlo en perfecto estado, pero cuando llegó la fecha la entidad condenada "no realizó ninguna de estas opciones".
De nuevo, ambas empresas pactaron un subarriendo pero cuando llegó la fecha pactada de nuevo ni se ejercitó la opción de compra ni se devolvió el molino, calculando los daños causados a la empresa propietaria del mismo en 342.000 euros.
Contra la sentencia, que no es firme, cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo.
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