Calderón, una lotería para los Cavs

El conocido e ilusionante día del 'Gordo' en España es el más apropiado para explicar que a Cleveland le ha tocado la lotería con ese fichaje vía mínimo de veterano por el que Calderón recaló en la franquicia subcampeona de la NBA. Su rol se atisbaba muy secundario, y más con la llegada de potentes nombres como Derrick Rose o Wade, figuras de esta liga que no están en su mejor momento pero que se añadían a una previa incorporación estelar de Isaiah Thomas. La plaga de lesiones que asola la posición de base le situó como titular desde el pasado 20 de noviembre ante Detroit y a su equipo no le ha ido nada mal, 17 victorias en 19 encuentros con el extremeño iniciando la batuta.

El 'playmaker' serón ha aprovechado la oportunidad y se le nota contento. Vuelve a disfrutar del baloncesto tras un inicio de 'regular season' donde fue condenado al ostracismo pese a que ya había ausencias como la de Thomas. El narrador del Quicken Loans Arena disfruta de sus asistencias y triples al grito de 'Joooouuusseee' y pesos pesados del vestuario le alaban al comprobar in situ su tangible contribución. El mismísimo LeBron James, la estrella más rutilante de este firmamento, aseguraba tras el triunfo ante Washington que desde que «está en la NBA siempre ha estado muy arriba en la lista del ratio asistencias-pérdidas. Está bien tener a alguien así para empezar los ataques, además de que tira muy bien desde más allá del arco. Si añades su gran lectura del juego, lo bien que trata la pelota y que tira y lo da todo, le ves tomando de nuevo el control».

Elogios recibidos también en boca de Dwyane Wade, quien reconocía que «odiaba» jugar contra el base español porque «nunca perdía la pelota, nunca arriesgaba un pase, y, como ha demostrado últimamente, también puede anotar tiros abiertos. Nos ha venido bien. Ha dado estabilidad a la posición, al grupo y al equipo».

Los números de Calderón en la casi veintena de encuentros en el cinco inicial ha revalorizado su estadística global del curso, que ya llega a los 17,7 minutos por noche de media. En este periplo victorioso, ha protagonizado partidos en los que alcanzó la treintena de minutos, con una media de 21,7 en sus 18 titularidades. Llama la atención que en las victorias ha disputado una media de 20,2, mientras que en las derrotas se quedó en 11,6 minutos. En el mes de diciembre, el de la lotería, el de Villanueva de la Serena ha promediado 7,3 puntos con más del 50% de tiro en lanzamientos de dos y de tres. Ha cogido 2,2 rebotes y ha repartido 3 asistencias con una buena aportación defensiva que roza el robo de balón por noche casi sin perder ninguno. En octubre sólo jugó 7 minutos por partido y en noviembre subió a 17.

Su última actuación desde el quinteto fue este viernes ganando Cleveland a Chicago en un apretado 115-112, con 8 puntos, 5 asistencias, 1 rebote y un robo en 24 minutos. Los Cavs cortaban la buena racha de unos Bulls que cuentan con un Mirotic muy inspirado, con 15 puntos.

Una espiral al alza que vuelve a estar en peligro pues es esperado el regreso de Isaiah Thomas, el exbase de Boston implicado en el traspaso de Kyrie Irving, un jugón en estado puro al igual que la otra parte del acuerdo y que parece haber superado sus molestias de cadera.

Y como estamos en Navidad y la NBA suele cuidar mucho estas fechas, al extremeño le aguarda mañana domingo un choque muy especial ante uno de sus 'ex', aunque fuera por un par de horas. Cleveland y el campeón Warriors reeditan la final en un duelo con Calderón de inicio. Una lotería para los Cavs.