Los Cornelio resisten en El Arquillo

Desde Villa del Arco, más conocida como El Arquillo, se abarca con la vista una enorme porción de la provincia de Cáceres. Dentro de un tiempo (nadie sabe cuánto) se podrá ver pasar el tren de alta velocidad sobre los largos viaductos que se están construyendo en paralelo a la A-66. Será un gran contraste el de esa tecnología puntera de las comunicaciones en comparación con las precarias condiciones de un poblado en el que sólo viven Julián Cornelio, Emilia Fernández y su hija Guadalupe, las tres únicas personas que residen de forma permanente en esta pedanía de Cañaveral, situada tres kilómetros sierra arriba, que hasta 1975 tuvo su propio ayuntamiento, pero quedó prácticamente despoblada tras la masiva emigración de los años cincuenta y sesenta. Los Cornelio resisten en solitario desde hace más de cuarenta años.

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