La lluvia no consiguió aguar una fiesta protagonizada por la música

La amenaza de lluvia se hizo realidad, pero ni siquiera eso pudo enturbiar una gala que se movió al ritmo de la música.

La entrega de las Medallas de Extremadura es sin duda el principal acto político y social de la región. Personalidades de toda índole se dan cita en el Teatro Romano de Mérida, donde tampoco faltan quienes quieren mostrar su descontento por las decisiones del gobierno autonómico.

Como en pasadas ediciones, la situación económica marcó las quejas de quienes pedían empleo («menos medallas y más trabajo» fue uno de los lemas coreados) y una correcta aplicación de la renta básica, una prestación que existe desde el pasado año pero que para muchos no está cumpliendo con las expectativas generadas.

Por ese motivo, los Campamentos Dignidad de Extremadura, reunidos ayer en Mérida, acordaron iniciar movilizaciones para exigir la «retirada inmediata del decretazo sobre la renta básica», una protesta que iniciaron a la llegada de los líderes políticos de la región al Teatro Romano.

Los pitos de la entrada se cambiaron por aplausos en el interior del recinto, al que se accedía tras superar un cordón de seguridad que, además de revisar el interior de bolsos y bolsas, no dejaba pasar los tapones de las botellas de agua.

Ya iniciado el acto, que fue presentado por los periodistas extremeños Francisco Moreno y Sherezade Mateos, el más aclamado fue Robe Iniesta, líder de Extremoduro. Fue aplaudido y jaleado cuando subió al escenario y cuando fue mencionado. También se llevó una calurosa bienvenida Virtudes Carrasco, presidenta de la Asociación para la Donación de la Médula Ósea de Extremadura. Nada consiguió aguar la fiesta, ni siquiera el breve aguacero que cayó al inicio de la entrega de las Medallas.

Mucha música

Además de por los galardonados, la noche estuvo protagonizada por la música. Clásica, como el estilo empleado para la interpretación de los himnos de España y Extremadura con la que arrancó la gala. Flamenca, como el aire que le dio la cantaora extremeña Celia Romero a la segunda vez que sonó el himno regional. Pero, sobre todo, rockera, con la presencia de Robe Iniesta y el concierto de Loquillo.

Con él se cerró una velada en la que ni siquiera faltó el 'selfie' de turno, que en esta ocasión tuvo como protagonista a Elia, la imagen de la campaña 'Avanzar ilusiona' con la que se ha promocionado el Día de Extremadura, y como fotógrafo de honor al presidente extremeño, José Antonio Monago.