El alcalde de Olivenza declara ante el juez sobre una multa anulada a su primo

El alcalde de Olivenza, Bernardino Píriz, declaró ayer en el juzgado de Olivenza para aclarar ante el juez si favoreció a un familiar propiciando que le retiraran una denuncia de tráfico. Los hechos se remontan al 25 de junio de 2013, cuando un primo hermano del regidor estacionó mal su vehículo y fue multado por un agente de la Policía Local. El coche, un todoterreno de gran tamaño, estaba aparcado en oblicuo impidiendo parcialmente el paso de otros vehículos, que debían subirse a la acera para circular, según el agente que formuló la denuncia.

En el proceso que siguió después la sanción, una de las letras de la matrícula fue cambiada por otra con el fin de que hubiera que anular la multa. En un primer momento el juzgado archivó el caso pero, según el agente implicado, la Fiscalía ha recurrido y el asunto se ha reabierto, razón por la que Píriz fue citado a declarar ayer a las diez de la mañana.

Para el alcalde oliventino esto es un tema político iniciado por el exportavoz municipal del PSOE Manuel Cayado (ahora retirado de la política desde que perdió las primarias socialistas en Olivenza). El propio agente que puso aquella denuncia, con el que HOY habló ayer, corrobora que la denuncia judicial la hizo el PSOE. Y reconoce que fue él quien modificó la letra de la matrícula del primo del alcalde, pero tras ser «coaccionado y amenazado» en una charla privada que tuvo lugar entre ambos en el despacho de Píriz. Según este agente -identificado con el número 1095210 y de baja en estos momentos por la presión, dice, a la que le somete el alcalde-, la denuncia la formuló el PSOE en noviembre de 2013. Los socialistas tomaron esta decisión por la información que les llegó de un vecino de la localidad, que vio cómo multaban al primo del alcalde y aquel bromeaba a continuación con el papel de la denuncia tras hacer una bola con el papel simulando jugar al fútbol con ella. Contó los hechos al grupo socialista y los concejales de la oposición siguieron el curso de los hechos. Entre otras cosas, averiguaron que una letra de la matrícula había sido cambiada y la denuncia quedó a nombre de una mujer de Sevilla, a la que nunca llegó notificación alguna. La denuncia quedó anulada al no coincidir la marca del coche y la placa de la matrícula. El caso fue archivado en diciembre de 2013.

Según Píriz, este sobreseimiento se debió a que el juez de instrucción no vio ningún indicio de delito. «Entre otras cosas -explicó ayer el primer edil antes de prestar declaración- porque el máximo jefe de la Policía Local es el alcalde, que en cualquier momento puede estimar las alegaciones y puede retirar cualquier sanción, así que sería absurdo denunciar a alguien que tiene la capacidad para hacer esto. Además, el policía ha testificado que esa letra la modificó él y el expediente queda nulo».

Pero tanto el grupo socialista como el Ministerio Fiscal recurrieron el archivo del juez instructor el pasado mes de julio, según afirma el policía local.

El agente ya compareció en el juzgado de Olivenza el pasado 17 de diciembre. Explicó en calidad de testigo que él modificó la letra de la matrícula del primo del alcalde porque sufrió las amenazas de Píriz, versión que ayer corroboró a HOY. Según dijo, accedió a la petición del alcalde para no perder una gratificación salarial que concede o quita el regidor y que supone un veinte por ciento de la nómina.