La Junta indicó Alange como zona para las centrales de gas

Una, dos, tres, cuatro, y hasta cinco. ¿Por qué tantas empresas han dicho que quieren poner una central de gas de ciclo combinado en el entorno de la presa de Alange junto a Mérida? Ni se han copiado unas a otras ni son ganas de hacerse la puñeta, simplemente es el lugar designado por la Junta de Extremadura.

Lo reveló ayer Alfonso Perianes, director general de Ordenación Industrial, Energía y Minas. Al aprobarse en el año 2002 las redes de gas natural nacionales, se recibieron en el Gobierno central 60 solicitudes para producir electricidad en centrales con ese combustible, pero ninguna de ellas en Extremadura.

«Por eso la entonces Consejería de Economía, Industria y Comercio propuso, y fue la única Comunidad que lo hizo, emplazamiento idóneo para esas centrales», dice ahora el director general. Y es que la zona de la presa reúne las tres dotaciones imprescindibles: el gasoducto Almendralejo-Portugal, redes de electricidad con capacidad suficiente para recibir y evacuar la energía producida en las centrales, y agua refrigerante de sobra.

El proyecto de International Power del que no se tiene noticia desde hace dos años probablemente ha desistido, cree la Junta. El más avanzado según Perianes es el de Iberdrola, que moverá su emplazamiento para alejarse más de dos kilómetros de la localidad de Alange; la empresa EGL, que elige terrenos del municipio de La Zarza, ha presentado al Ministerio de Medio Ambiente la memoria-resumen y el estudio ambiental con las sugerencias que aquél le ha hecho. Hidrocantábrico (Alange) ha presentado memoria-resumen y en «breves días» aportará el informe de impacto ambiental, mientras que Endesa-Sevillana (Mérida) también ha hecho llegar la memoria-resumen al Ministerio pero todavía no ha recibido de éste sugerencias para incluirlas en el informe de impacto. En cualquier caso la Junta considera que las centrales de gas son una «transición» desde la energía nuclear hacia una mayor presencia de fuentes renovables.