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EFE
Sábado, 28 de julio 2007, 03:19
La Guardia Civil investiga si la muerte de un matrimonio húngaro, cuyos cadáveres fueron hallados anteayer en Sant Joan (Ibiza), fue resultado de un juego sexual ante el hallazgo de material pornográfico y la falta de señales de resistencia de la mujer, a quien mató el marido y éste se suicidó después. Los primeros indicios apuntan a que la pareja acordó un suicidio, dentro de un ritual «místico». Según informaron fuentes del Instituto Armado, la Policía Judicial trabaja con esta hipótesis tras el hallazgo en la habitación del hotel donde se hospedaban de material pornográfico que poseía la pareja y de revistas sobre budismo y reencarnación, que también podrían vincularse a otro tipo de prácticas, de carácter ritual.
Las mismas fuentes confirmaron que el hombre, Robert B., nacido en 1961, mató a la mujer, Kathan O., nacida en 1978 y que habría muerto por asfixia, y se habría suicidado 24 horas después, ahorcándose en un árbol cercano a donde se encontraba el cadáver de la mujer, en la zona boscosa de Es Cuieram. Al parecer, el hombre le ató las manos a la espalda con unos grilletes y la asfixió con una cuerda tras provocarle varios cortes con un cútter. Un día después, se suicidó.
La pareja se encontraba en Ibiza de vacaciones, alojada en hotel de San Antonio. Los cuerpos sin vida fueron encontrados por un vecino, y los resultados iniciales de la autopsia practicada a los cadáveres revelan que el hombre mató a la mujer.
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