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GUILLERMO BRUNET
Miércoles, 7 de julio 2010, 11:26
Se lo habían advertido de antemano, que la cita tenía tiempo de caducidad: no más de veinte minutos. Y sin embargo duró casi hora y media. Hora y media en la que el consejero Carlos Javier Rodríguez y el director de Deportes, Fabián Quesada, no se cansaron de escuchar el nuevo proyecto que le presentaron los dirigentes de la Fundación Basket Mérida. Un proyecto que tiene un único destino: la Leb Plata.
A la espera del informe favorable de la Consejería de Deportes, a punto de llegar (el encuentro se produjo el pasado viernes), el club dirigido por Pedro Carreras saldrá en la tercera categoría del baloncesto español la próxima temporada. «Tenemos un 98% de posibilidades de inscribirnos antes del viernes», deslizan desde los intestinos de la entidad. El presupuesto está tan amarrado que el presidente se permite el lujo de sugerir que «si no saliésemos en Plata, el palo sería fortísimo».
Tienen el apoyo incuestionable y clave del Ayuntamiento (de hecho, el alcalde, Ángel Calle, acompañó a la delegación emeritense a su reunión con la Junta para certificar la seriedad del proyecto) y un sinfín de patrocinadores y colaboradores a la espalda. Un mérito que el equipo de Carlos Díaz se curró en la cancha el curso pasado. Porque el Mérida ha ascendido por vía deportiva, aunque perdiese la última eliminatoria el pasado mes de junio ante el Festival de Cine de L'Alfàs de Alicante en el pabellón Guadiana. Subían cuatro, pero como ya existe algún que otro equipo que ha ratificado su renuncia a la categoría, el mejor quinto es el designado para ocupar esa plaza.
Y el mejor quinto es el Mérida, que tiene hasta el viernes de plazo para presentar avales y canon en la Federación Española de Baloncesto. «Nos queda en estos últimos días atar cabos, nada más. La decisión es unánime en toda la junta directiva. Estamos muy ilusionados», recalca el presidente.
300.000 euros
El presupuesto se incrementará en 120.000 euros. Es decir, que se está trabajando en torno a los 300.000 euros para configurar una plantilla que, ante todo, sea modesta. A la espera de confirmar la categoría y el nombre del entrenador, que será seguramente Carlos Díaz, la intención del club es mantener el 60% del bloque que el año pasado levantó de nuevo el interés de la Mérida baloncestística. El resto de la plantilla se completaría con jugadores nacionales contrastados. Ya han salido los primeros nombres, como el de los verdugos en la última eliminatoria de ascenso Jorge Lledó y Kuko Cruza. «Mi intención es no tener a ningún americano, prefiero a jugadores nacionales, de la tierra, de Extremadura. Con fichar a cuatro nos vale. Pero claro, primero hay que hablarlo con el entrenador», dice Pedro Carreras.
«No nos vamos a volver locos. Somos serios. Eso lo tenemos muy claro. Tenemos esto, con esto contamos y no nos pasaremos ni un euro del presupuesto. Los jugadores cobrarán tan solo un poquito más que el año pasado. No queremos defraudar ni deber a nadie», concluyen desde el club.
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