Los vecinos del Casco Antiguo temen nuevos derrumbes en la barriada

Lo ocurrido el domingo no es un caso aislado. Fue la última de las casas del Casco histórico en sufrir un derrumbe, pero no la primera. Y los vecinos de la barriada temen lo peor: que haya más.

El Casco Antiguo se desploma ante el pavor de los residentes, que piden más vigilancia sobre los inmuebles que están en estado de ruina para garantizar la seguridad en la zona.

José María Soriano, presidente de la asociación del Casco Antiguo, asegura que, si no se toman medidas, se producirán más situaciones parecidas a la del pasado domingo, en la que se venía abajo el suelo del piso superior de una vivienda de dos plantas.

Soriano explica que han pedido al Ayuntamiento de Badajoz en varias ocasiones que realice un censo en el que se registre el diagnóstico de los edificios y calles del Casco Antiguo que se encuentren en estado de ruina y adopte decisiones para que no se desmoronen. «La prevención es fundamental», señala.

Aunque destaca que el propietario es el único responsable de cuidar su casa y arreglar los desperfectos que sufra la misma, incide en que el cometido de la Administración local es actuar ante casos extremos.

«Lo que pedimos al Ayuntamiento es que asuma su responsabilidad subsidiaria. Es competencia del Consistorio vigilar los inmuebles más deteriorados y cuando detecte alguno en muy mal estado dirigirse al particular para solicitar que lo arregle. Si éste no cumple con su obligación, el Ayuntamiento tiene que tomar medidas y realizar una intervención con carácter subsidiario, lo que implica que luego le puede pasar factura al propietario».

Lo que es cierto es que dar un paseo por los alrededores de la Plaza Alta y pasar por las calles San Lorenzo o Concepción Arenal es claramente un riesgo. Los datos avalan esta circunstancia.

En verano de 2008 las viviendas en la ciudad con un expediente de ruina abierto superaban la cifra de 400, la mayoría de ellas en el Casco Antiguo, una barriada donde los técnicos municipales tenían contabilizadas en 1999 206 casas en estado «muy deficiente» y más de 600 en estado «deficiente», adjetivos recogidos en el Plan Especial de Ordenación, Protección y Actuación en el Centro Histórico de Badajoz bajo el epígrafe «Estado de la Edificación».

De hecho, son varios los derrumbes registrados en esta zona durante los últimos meses. A finales del mes de mayo se desplomaban tres plantas del interior de un edificio en la calle San Juan. Semanas más tarde, a mitad de junio, cedía la pared de una casa en la calle Luis de Morales. Y el pasado domingo caía el suelo del piso superior de una casa en la calle San Lorenzo. Afortunadamente, en todos estos incidentes sólo ha habido daños materiales, excepto en éste último, en el que se ha registrado un herido.