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ROCÍO SÁNCHEZ RODRÍGUEZ
Lunes, 11 de abril 2011, 16:30
El día después de la gran fiesta de la 'caravana de palomos' los implicados hacen balance y lanzan un mensaje común: fue todo un éxito. Sin precedentes. La Policía Nacional dio la cifra de más de 8.000 asistentes, pero a medida que fue avanzando la noche se habló de hasta 12.000 personas. Y de todas las edades. Ni los propios organizadores se imaginaron semejante respuesta a su convocatoria.
Todos no cabían en la Plaza Alta, muchos optaron por ver el espectáculo -sobre todo la actuación de Falete- desde la muralla.
La Plaza amaneció repleta de bolsas y vasos de plástico, eran las huellas del botellón, pero a media mañana los operarios de FCC ya le habían devuelto su estado original. En general, satisfacción absoluta por el buen y variado ambiente que se vivió.
El triple de negocio
Los hosteleros de la Plaza y alrededores están encantados con el evento. Algunos ni siquiera abrieron ayer domingo. «Ha sido el día que más caja hemos hecho de todos, más que en la Feria y más que en Al-Mossassa, que suele ser nuestra jornada grande, pero esta vez hemos tenido un 30% más. Y si lo comparamos con un sábado cualquiera, el volumen de caja ha sido el triple. También ha supuesto el triple de trabajo. Tuvimos que quitar los veladores porque estaba todo hasta arriba. No se esperaba tanta gente. Se fue un poco de las manos, pero ojalá se celebre todos los años», comentaban desde La Casona Alta. «Hubo mucha gente que se trajo el botellón de casa, pero otros muchos también se compraron aquí las bebidas. Lo que hicimos fue dar vasos y macetas de plástico para que los clientes las pudieran sacar a la calle. Pedimos al Ayuntamiento que nos dejara poner una barra fuera, pero el día anterior nos dijeron que no».
En el Café Dadá, en la Plaza de la Soledad, también estaban contentos con los resultados, «aunque aquí hubo más clientela durante la Noche en Blanco. Aún así, fue una jornada muy buena, y vino gente de todas partes: Salamanca, Sevilla, Madrid... Eso es positivo porque se ha promocionado la ciudad. Hay que gente que no conocía Badajoz y se ha llevado una grata sorpresa».
Cierto es que gracias a la 'caravana de palomos cojos' organizada por el programa El Intermedio, los visitantes de fuera han conocido uno de los enclaves de la ciudad y la capital pacense se ha convertido en lugar recomendado de ocio.
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