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REDACCIÓN
Sábado, 18 de junio 2011, 03:42
El Juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Cáceres ha dado la razón a Manuel Aunión, secretario del Ayuntamiento de la capital, en el recurso que presentó contra la resolución de alcaldía que le denegaba el permiso para seguir en su puesto de trabajo y jubilarse a los 70 años.
A finales de junio del año pasado -o sea, seis meses antes de cumplir los 65 años-, Aunión pidió formalmente seguir como secretario hasta los 70 años. Tres semanas después, una resolución de la alcaldía le reconoció el derecho a prolongar su vida laboral. Sin embargo, otra resolución de alcaldía posterior, de diciembre de 2010, le negaba esa autorización y decretaba su jubilación forzosa por estar sujeto a la instrucción de un expediente disciplinario por la supuesta comisión de faltas tipificadas como muy graves.
En su fallo, el magistrado-juez del número 1 de lo contencioso-administrativo declara la nulidad de pleno derecho de la resolución de alcaldía fechada en diciembre de 2010, la que ordenaba la jubilación forzosa. La sentencia explica que los dictámenes de ese tipo sólo se aceptan «para rectificar errores materiales, de hecho o aritméticos» (fechas, datos de expedientes y similares), que deben ser «ostensibles, manifiestos e indiscutibles». Al no encontrarnos en este caso ante ninguno de estos supuestos, razona la sentencia, procede declarar nula la resolución recurrida por Aunión. El fallo permitirá al secretario volver a su trabajo y jubilarse a los 70 años.
La sentencia no es firme, y contra ella se puede presentar recurso de apelación, aunque ayer, Elena Nevado anticipó que «a priori, el Consistorio no va a recurrir porque considera que en el anterior equipo de gobierno tomó una decisión ilegal».
«Bastante daño se ha hecho ya», subrayó la regidora cacereña haciendo referencia a la contratación de «un enchufado», dijo, para ocupar un puesto en la secretaría general. Nevado aludía así al actual concejal socialista Víctor García Vega.
Sobre la sentencia también se pronunció ayer Carmen Heras, durante un videochat mantenido con los lectores de HOY.es. «No puedo por menos que aceptar la sentencia. El juez ha entendido que le corresponde, pero tengo que decir que es la solución más fácil. Un funcionario tiene derecho a reeengancharse, pero si está tan claro no sé porqué tenía yo que firmar o no un documento».
Este diario no logró recabar ayer la opinión de Manuel Aunión.
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