Escubal escapa del descenso

Escubal Badajoz ha sumado ante el Balonmano Pozoblanco su mejor victoria de la temporada (38-24) en un partido donde la mayor calidad de los pacenses les ha permitido sumar dos puntos que les sirven para salir de los puestos de descenso, tras la derrota de Teucro en Torrelavega. Volvió a ganar Escubal en La Granadilla, el escenario donde de un tiempo a esta parte vuelve a hacerse fuerte.

Ganó y lo hizo con cierta solvencia, en un partido más cómodo de lo esperado, con una sensación de suficiencia que no se vislumbraba desde hace tiempo. Mandó cuando quiso y como quiso, y ninguna de las alternativas planteadas por Pozoblanco hicieron mella en un equipo que demostró tener más recorrido que su rival de esta jornada, del que sólo le separaba un punto antes de este partido. El conjunto vallesano no pudo plantar cara a Escubal y cedió a los pacenses la gran oportunidad para salir del descenso y meter en apuros a su rival directo. Esta victoria da un balón de oxígeno a los integrantes de Escubal antes del parón navideño, ya que cierran el año con un claro triunfo y se van de vacaciones con las mejores sensaciones.

Ruptura de planes

Se presuponía un partido igualado en el feudo pacense, pero Raúl Delgado quería romper los planes iniciales. Los extremeños salieron muy enchufados al partido, y tan solo diez minutos después del saque inicial, la maquinaria de Escubal comenzó a funcionar de la mejor manera. Las paradas del arquero cacereño daban alas a sus compañeros, que espoleados por durísimos lanzamientos exteriores de Demovic, Milosevic y Hernández, se encargaron de poner las primeras ventajas en el marcardor. A partir de ese momento, el partido resulto de lo más placido para el conjunto entrenado por Raúl Caballero, que contó siempre con el control del juego y el marcador. Pozoblanco por su parte aguantaba el chaparrón mientras intentaba no descolgarse demasiado pronto, sin causar muchos problemas a una defensa 6-0 de Escubal que rayó a gran altura. Didac Villar y González lo intentaron de todas las maneras posibles pero tuvieron enfrente un muro complicado de derribar. Por parte local, Demovic con 8 y Milosevic con 10 y un gran encuentro personal fueron los más destacados además del portero ya mencionado Raúl Caballero.

Aún así, recortaba levemente Pozoblanco las diferencias y se iba al descanso con 17-10 cuando las ventajas habían estado rondando los diez goles pocos minutos antes. Paulatinamente Magí Serra intentaba subir el tono defensivo de sus hombres y en cuanto veía ocasión realizaba defensas mixtas a la primera línea de Escubal. No conseguía engancharse de nuevo al partido ya que Escubal seguía a lo suyo: defensas muy fuertes y numerosas paradas de Raúl y de Fede Sincich cuando salió a jugar, robos de balón, salidas rápidas en cuanto había ocasión y juego posicional más pausado rotando a todos los integrantes de la plantilla.

Mediada la segunda mitad se lo jugó el todo por el todo el técnico visitante y planteó una defensa individual de todos sus jugadores por toda la pista, lo que provocó unos compases de partido algo alocados. Escubal mantenía su ventaja pero perdía bastantes balones en ataque y dependía de su defensa para no dejar a Pozoblanco pensar que la remontada era posible. Un tiempo muerto de Raúl Caballero a pocos minutos del final volvía a poner orden en las ideas de su equipo, y con un parcial de 6-1 favorable, los locales ponían punto y final a un partido que habían dominado de principio a fin, cerrando el año fuera del descenso y llevándose la ovación de sus aficionados.

Raúl Caballero

Raúl Caballero comentaba tras el partido que esta era una victoria muy necesaria «porque el rival era nuestro perseguidor más inmediato y porque el equipo necesitaba quitarse el mal sabor de boca de la derrota en Barakaldo. Hemos salido a tope desde el inicio y prácticamente nos ha salido todo bien. Algún momento ha habido en que nos ha faltado algo de claridad de ideas, pero la valoración global del partido es altamente positiva, con todo el mundo aportando de nuevo y todos los jugadores siendo parte de esta victoria tan importante. Irnos de vacaciones con la satisfacción de vernos fuera del descenso es algo muy grande para nosotros».