«Habrá seguridad jurídica hasta 2020»

A pesar de la crítica situación económica general y del tremendo golpe al sector de las renovables con la supresión de las primas, Joló entiende que proyectos como el fotovoltaico tienen futuro. De un lado, porque España es el país de la UE con más dependencia exterior para cubrir sus necesidades energéticas (dependemos un 80% de las importaciones de petróleo y el gas). De otra parte, porque se dan las condiciones meteorológicas para desarrollarlos, sobre todo en la región, aunque las perspectivas de que se reanuden las primas son escasas. «Lo único es que todos los proyectos tendrán que ser de grandes dimensiones para intentar ser viables», subraya. Además, indica que el Gobierno central maneja un marco normativo para el sector renovable que «aportará seguridad jurídica» hasta 2020, algo que no ocurrió en la anterior legislatura cuando el ministro Miguel Sebastián recortó a Extremadura un 28% las horas de sol con derecho a prima para fotovoltaicas.