El Ayuntamiento dedica una calle al arcipreste de Jaraíz

Son pocos los sacerdotes que ejercen su labor pastoral en una misma localidad y en una misma parroquia durante medio siglo. El arcipreste de Jaraíz, Joaquín Jiménez García, es uno de ellos. Lo hace desde septiembre de 1962, en la iglesia de San Miguel, y desde 2004 también en la otra iglesia jaraiceña, la de Santa María, ayudado por dos vicarios.

El pasado domingo, toda la comunidad cristiana de Jaraíz se dio cita en la primera para rendirle un caluroso homenaje, con motivo de la celebración de sus bodas de oro sacerdotales, en una eucaristía cantada por la Coral Jaraiceña, dirigida por Carlos Osuna.

Reconocimiento

La Coral Jaraiceña es una de las muchas iniciativas llevadas a cabo en la localidad, de la que sigue siendo director. Por eso, el Ayuntamiento, al término de la misa de acción de gracias, realizó un acto cívico, en reconocimiento a la labor desarrollada en todos los órdenes por el arcipreste, pero de manera muy especial en pro de la cultura, consistente en la dedicación de la calle Fleming, en la que vive y está la iglesia de San Miguel.