Borrar
Urgente Herida una mujer por asta de toro en Montehermoso
Un grupo de turistas en la Plaza Mayor bien abrigados frente a la lluvia, con veladores vacíos al fondo . :: LORENZO CORDERO
La lluvia arruina las previsiones de ingresos de la hostelería local
CÁCERES

La lluvia arruina las previsiones de ingresos de la hostelería local

Los empresarios reducen el número de contratos temporales para esta semana ante el descenso de clientes en las terrazas y en los locales

CRISTINA NÚÑEZ

Miércoles, 27 de marzo 2013, 02:22

La visita turística a Cáceres exige esta Semana Santa una condición: llevar paraguas, chubasquero y botas contra la lluvia. No es la mejor manera de descubrir los encantos de una ciudad que busca resarcirse estos días del largo invierno, pero parece ser la única que hay. No para de llover, en lo que va de mes han caído en la provincia 144 litros por metro cuadrado, el triple de lo habitual, y las previsiones para el resto de la semana dan poca tregua. Sólo hoy miércoles y mañana jueves por la tarde se reduce el riesgo de lluvia a niveles inferiores al 60%.

El resto, agua a tope. Carmen, Jordi, Silvia y Begoña, un grupo de amigos de Barcelona, explicaban ayer en la Plaza que estaban disfrutando la estancia, a pesar del aguacero que les cayó durante la visita guiada. Tenían el viaje programado desde hacía dos meses y no estaban dispuestos a suspenderlo. Pedro Pablo Adarve y su familia, de Madrid, también explicaban que la lluvia no estaba siendo un gran impedimento.

La hostelería, sin embargo, no es tan conformista con el estado de los cielos. El sector lamenta que un periodo tan próspero como el de la Semana Santa quede desaprovechado por la climatología. Ayer hacia la una de la tarde las terrazas de la Plaza Mayor ofrecían una estampa desoladora. Poco antes, había caído una tormenta que había hecho levantarse a los pocos que disfrutaban de las vistas sentados en los veladores. Un barrido para pulsar la opinión de los hosteleros de la zona deja un diagnóstico común: la cosa está mal. Inma Arroyo, del Mesón El Encinar, asegura que la desilusión es grande. «Tenemos cuatro días para remontar el invierno y este año va a ser difícil». Ella, al igual que otros hosteleros, ha tenido que reducir el número de personas contratadas para estos días. «Los que hay, tampoco están haciendo mucho».

Un relato parecido es el de Emilio Rey, de 'El Pato', que se atreve a cifrar en un 25-30% la reducción de turistas de estos días. También ha contratado a menos camareros de los que tenía previsto, porque la terraza está vacía. Un cartel en el que puede leerse «disponemos de mesas en el interior» anima a los clientes a pasar dentro del bar, pero la afluencia se resiente.

Mejoría

Victoria Eugenia López capta clientes en la entrada del Asador Carlos V, también en la Plaza. «En la terraza no hay nada». Cree que turistas han venido y que hay movimiento, pero que la lluvia afecta. Más de lo mismo en 'Los Portales', otro mesón situado en el último tramo de la Plaza. «También son días para que los cacereños salgan, y con este tiempo no lo hacen», apostilla David Román, confiando en que la cosa mejore para los días que quedan.

Con un «no hay nadie» describe Luis García Martín, del Corral de las Cigüeñas, el inicio de esta Semana Santa en su establecimiento, enclavado en la ciudad monumental. Él también ha tenido que reducir las contrataciones (el año pasado contó con tres personas extra y esta vez sólo con una). Dice que si llueve mucho, el visitante, «ni pasa a la parte antigua». ¿Soluciones? Pocas, viene a decir García Martín, más allá de que la cosa se enderece. «En realidad, los días más fuertes son el jueves, el viernes y el sábado».

Una pincelada más de locales fuera del cogollo monumental. Pedro Suárez, dueño de los mesones Pilichi y Tapeo, en Mejostilla y Casa Plata, dice que el consumo de barrio también se resiente por la lluvia, además de por las duras condiciones económicas que atravesamos.

Hoteles y guías

Los hoteles no parecen percibir tanto este declive. Jesús Bravo, del Casa Don Fernando, en 'primera línea' de Plaza, cuenta que ha habido alguna anulación de reserva pero que, en paralelo, también se ha pedido información. «Podemos decir que estamos al 90%». El hotel Iberia también está prácticamente al completo, y con la misma dinámica de anulaciones que se van compensando con nuevas reservas. «Nos estamos defendiendo», afirma Francisco Pérez, su director.

Desde la Asociación de Guías Turísticos completan este retrato de una Semana Santa «horribilis» en lo que se refiere a la explotación económica de la misma. Longina Arroyo, guía oficial, explica que aunque la gente viene y busca sus servicios, sí que se nota una disminución respecto al año pasado. «Estamos todos, estos días trabajamos siete guías, pero la lluvia no ayuda», se lamenta Longina ya con la mirada puesta en el otros puentes.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

hoy La lluvia arruina las previsiones de ingresos de la hostelería local