«Necesitamos dinero para ayudar a pagar facturas»

Segundo Sánchez trabaja como voluntario y destaca que en la parroquia de Fátima se persigue no ser una mera correa de transmisión para ofrecer alimentos, sino «dar solidaridad entre una comunidad de bienes». Llegar a donde surgen las necesidades. Actualmente preocupa el hecho de que muchas personas no tenga para pagar sus facturas. «Hay gente que llega porque le van a cortar, la luz, el agua o el alquiler», describe este voluntario.

Esta parroquia ofrece, de manera autónoma, productos perecederos a las personas que lo necesitan. Cada 15 días están entregando pollo, pan y patatas.