La I Feria del Galgo se cerró con una concurrida jornada de carreras en el polígono

Con una concurrida jornada de carreras en el polígono industrial Montepozuelo, se dio por concluida ayer al mediodía la I Feria del Galgo que se ha estado celebrando en Villanueva de la Serena durante todo este fin de semana.

El concejal villanovense de Turismo, Pedro Pascual, apunta que «teníamos cierto temor, porque al ser la primera edición, no sabíamos cómo iba a responder la gente, pero la verdad que la respuesta ha sido extraordinaria».

El evento arrancó el viernes en el teatro las Vegas con la inauguración oficial a cargo del alcalde, Miguel Ángel Gallardo, y los diferentes presidentes de las federaciones de galgos nacional y regional. A continuación tuvo lugar un recital flamenco.

El sábado el escenario de la feria se trasladó al recinto ferial en el que se celebró el concurso morfológico nacional, al que concurrieron más de un centenar de perros venidos de diversos puntos de la geografía nacional, como Valladolid, Alicante, Burgos, Madrid..

Además también hubo una exposición de fotos sobre galgos, caballos y toros de José María Álvarez. Al mediodía tuvo lugar la degustación de una caldereta, charlas sobre los galgos y las liebres, así como la visualización de las mejores carreras de galgos en una pantalla. Por su parte, por la noche hubo una fiesta galguera con tapas y vinos extremeños.

Por último, ayer se celebraron carreras de galgos en el polígono Montepozuelo. Una cita que congregó en algunos momentos a cerca de 2.000 personas, muchos de los cuales montaron su chiringuito y pasaron allí el día. Además de Portugal, acudieron sobre todo aficionados de toda Extremadura y de localidades con tradición galguera, como Campanario, Quintana de la Serena, Valdivia, Santa Amalia, Azuaga, Llerena. Hubo carreras inglesas y carreras de recortes.

Concepto distinto

Pascual asegura que está convencido que «muchos de los que estén en contra del mundo del galgo y hayan asistido estos días a Villanueva, seguro que se han ido con un concepto totalmente distinto, ya que aunque siempre hay de todo, ha quedado comprobado que los verdaderos aficionados cuidan y miman al máximo a sus animales».