Casetas-discotecas para jóvenes y mayores en el real de Caya

Si a mediodía las casetas hacen el papel de amplios salones de restaurante donde disfrutar de un largo almuerzo con familiares y amigos, por la noche se recogen las mesas y los farolillos para pasar a las luces de neón y la pista de baile. La música flamenca se cambia por el 'reguetón'.

La oferta del real de Caya es para todos los gustos. Y para todas las edades. Jóvenes y mayores, cada cual a su manera, disfrutaron del sábado noche en el ferial, una jornada marcada por el concierto de Melendi, que reunió a miles de seguidores. Algunos de ellos hicieron colas de más de 12 horas para lograr un puesto en la primera fila. De hecho, varios sufrieron lipotimias y bajadas de tensión cuando se encontraban esperando para acceder al concierto y tuvieron que ser atendidos por los servicios médicos.

En cuanto a incidentes durante la noche del sábado, los voluntarios de Cruz Roja realizaron un total de 73 asistencias, las más comunes por la ingesta masiva de alcohol o por heridas accidentales, aunque ninguna de las personas atendidas revestía gravedad. Hubo que hacer dos únicos traslados a centros sanitarios pero para la realización de pruebas complementarias.

Las intervenciones fueron principalmente en la zona de casetas y el botellón. Y en cuanto a las intoxicaciones etílicas, diez personas requirieron asistencia, tres de ellos menores de entre 15 y 17 años.

En la primera gran noche de feria, que se preveía ajetreada aunque resultó más tranquila de lo esperado, Cruz Roja destinó al recinto ferial tres ambulancias asistenciales, una de ellas de Soporte Vital Avanzado. En cuanto a personal, hubo dos médicos, tres enfermeros, ocho técnicos sanitarios, tres conductores y un operador.