Cáceres registró 91 muertes violentas en 2012, pero sólo una por homicidio

Sólo un homicidio. En el año 2012, de las 91 muertes violentas que se registraron en Cáceres, sólo hubo un caso de homicidio: un extranjero que murió como consecuencia de un golpe que le propinó otro en una pelea en una localidad del norte de la provincia. La cifra es muy inferior a los 10 homicidios contabilizados en el mismo periodo de tiempo en la provincia de Badajoz, en donde hubo 161 muertes violentas.

El Instituto de Medicina Legal de Cáceres, que dirige José María Montero, señala en su memoria del año 2012, hecha pública ayer que de las 91 muertes violentas, 38 fueron suicidios, aspecto en el que llama la atención que la mayoría fueron hombres (35 varones y 3 mujeres). En gran parte de los casos, en 25, fue por ahorcamiento.

En ninguno de los suicidios pareció evidente que se habían producido por situaciones derivadas de la crisis. Tampoco se aprecia un aumento elevado con respecto a otros años. En 2009 se registraron 42 casos, en 2010 fueron 36, bajó en 2011 a 35 y subió a 38 casos en 2012. El número de suicidios en la provincia de Badajoz en el año pasado fue de 58 casos.

El resto de las muertes violentas del año pasado en la provincia (descontando los casos de suicidio y homicidio), se debieron a accidentes. Fueron 51, de las que 16 se debieron a accidentes de circulación, 12 por caídas, cinco por ahogamiento, y tres como consecuencia de la explosión de la almazara 'Sierra de Gata' de Moraleja que sucedió en el mes de mayo.

Hubo dos casos de muerte por embestidas de animales, uno por un carnero y otro por una vaca; tres muertes por intoxicación, otra por arma de fuego, una de un golpe de calor, otra por compresión torácico-abdominal, una precipitación al vacío, una hipotermia, una muerte por un accidente con maquinaria y cinco fallecidos por sofocación.

Los forenses también tuvieron que investigar la causa de la muerte de personas, que la mayoría de las veces fueron encontradas sin vida en sus casas en donde vivían solas. Se les hizo la autopsia para comprobar que no habían intervenido terceras personas. Intervinieron en 33 autopsias de este tipo, 11 menos con respecto a 2011.

Personas vivas

Normalmente se conoce la intervención de los forenses en casos de fallecimientos, pero son muchas más las actuaciones que realizan con personas vivas. El año pasado fueron 3.814 las valoraciones periciales que realizaron. La mitad de ellas, 1.919 están encuadradas en las lesiones dolosas, que comprenden agresiones, violencia doméstica y agresión o abuso sexual. Es un descenso del 4,28% con respecto a los datos del año 2011.

En el grupo de lesiones culposas, que encuadra los accidentes de tráfico, otros accidentes y responsabilidad médica, fueron 1.119 valoraciones, lo que supone un incremento del 10,90% con respecto al año 2011. Los casos de analizados por posible negligencia médica fueron 18.

Los forenses hacen valoraciones psiquiátricas, que en 2012 se han incrementado un 3,9%. Tuvieron que valorar a 84 personas para ver si era necesario su internamiento, hicieron 149 valoraciones de drogodependencia, 82 de imputabilidad, 34 informes mentales, y decidieron sobre 182 incapacitaciones. También estudiaron 35 casos de agresiones o abusos sexuales.

En la memoria del Instituto de Medicina Legal de Cáceres llama la atención que casi una de cada tres personas que se presenta para ser reconocida ya ha sido valorada en otra ocasión. Se señala que, por ejemplo, comprobaron que cuando reconocían a una persona para informar si se le podía responsabilizar de un delito por su grado de drogadicción, en el 58% de los casos ya había sido atendida anteriormente.