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Los ediles socialistas Muñoz y Prieto, con Belén y Rufino. :: PALMA
El PSOE pone rostros a la cara más amarga del paro
PLASENCIA

El PSOE pone rostros a la cara más amarga del paro

Se trata de una pareja de mediana edad, desempleados, con tres hijos que están en acogida en el centro de menores al no poder atenderlos

EFE

Sábado, 6 de julio 2013, 11:05

El Grupo Socialista Regionalista en el Ayuntamiento puso ayer caras al «drama» del paro que numerosas familias sufren en la ciudad con los testimonio de Belén y Rufino. Se trata de una pareja de mediana edad, desempleados, con tres hijos que están en acogida en el centro de menores al no poder atenderlos y a los que la Junta concedió hace semanas una vivienda social en 'Las 300'.

Los concejales Jesús Muñoz y Flor Prieto comparecieron junto al matrimonio ante los medios para denunciar que Plasencia se ha convertido, en los dos últimos años, en la ciudad extremeña donde más ha aumentado el desempleo. Lo ha hecho en alrededor de un 40%.

El objetivo de la iniciativa, destacó Flor Prieto, «no es otro que ponerle cara al drama que están viviendo miles de familias placentinas ante la incapacidad de los Gobiernos central, regional y local de hacer realidad todas las promesas que sobre la creación de empleo hicieron hace ahora dos años».

«Belén y Rufino son el dato de humanidad y el rostro que le falta al listado de 5.379 desempleados que a día de hoy tiene la capital del Jerte», agregó la edil socialista.

Jesús Muñoz recordó a Pizarro el lema 'Lo primero el empleo' en el que basó su campaña a la Alcaldía y el crecimiento que, por contra, ha tenido en la ciudad.

Rufino, parado de la construcción, lleva cinco años sin encontrar empleo y actualmente solo cobra la ayuda de 426 euros del Gobierno central, aunque esta se terminará el próximo mes de octubre.

Su mujer Belén, que lleva en el paro todavía más tiempo. Ayer quiso compartir con la opinión pública su «rabia» ante el hecho de que, a pesar de que la Junta de Extremadura les ha adjudicado una vivienda social hace escasas semanas, no puede reunir en ella a sus tres hijos, que se encuentran en acogida en el centro de menores de Plasencia, al no poder mantenerlos, porque el dinero no le llega. El matrimonio ha querido dejar claro que ellos lo único que desean es trabajo para poder seguir adelante con su familia.

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