El alcalde visita el cortijo de Aprosuba en Alange

Desde hace unos años se tiende, de forma muy acertada, a buscar la normalización de los discapacitados psíquicos, al igual que cualquier otra persona. Y esa normalización va en todos los sentidos y, por supuesto, también en la necesidad de tomarse unas vacaciones.

Salir de la rutina, hacer actividades al aire libre, reunirse con amigos, participar en fiestas y pegarse un chapuzón en una piscina son actividades básicas en el verano.

Los usuarios de Aprosuba II también lo hacen desde hace ya muchos años gracias al hecho de tener a su disposición un chalé, cerca de Almendralejo, en el pantano de Alange.

Ese cortijo, que fue cedido por la Obra Social de Cajalmendralejo para uso y disfrute de Aprosuba II, es un rincón básico para esos días de vacaciones y descanso para sus usuarios.

Ayer ellos recibieron la visita del alcalde, José García Lobato, que quiso participar de las dos semanas de vacaciones que muchos de ellos disfrutarán por turnos en este enclave natural. «El punto más importante es que salen de su rutina diaria y lo hacen disfrutando de su cortijo».

Beneficios para la salud

Así de claro era ayer el alcalde, que destacó cómo este hecho «les favorece en su salud física y mental». «Y también el descanso que le produce a los familiares». Lo recordaba García Lobato, y es que se trata de la única semana al año que pueden disfrutar los padres de esos usuarios que en la mayoría de los casos tienen dedicación plena, «hay algunos que necesitan atención para todo», recordaba.

«Ellos están muy a gusto, disfrutan mucho, y para la familia es una forma de respiro, de desconectar de la vida rutinaria». También lo decía la presidenta de Aprosuba II, Pepa Carrasco. En estos momentos son usuarios del centro de día y del centro ocupacional los que están pasando unos días en el cortijo, y la semana que viene llegará otro grupo del centro ocupacional y del colegio especial San Marcos. También está abierto a usuarios de atención temprana y rehabilitación, o incluso a familias de usuarios, que quieren pasar unos días allí y que lo solicitan previamente. Barbacoas, concursos de chistes, guateques, fiestas, concursos de bailes o paseos son alguna de las actividades de las que disfrutan los usuarios.

Este año, además, la casa ha sido restaurada para que los usuarios tengan un mejor acondicionamiento.