El edificio Embarcadero acogerá conciertos y actos infantiles

Conciertos de música todos los fines de semana y actividades infantiles, entre otras propuestas lúdicas, acogerá el edificio Embarcadero, en Aldea Moret. Esta es la oferta que ha hecho la empresa Automáticos Leafex, que se encargará de la explotación de la cafetería ubicada en la antigua nave minera rehabilitada.

La mesa municipal de contratación acordó ayer adjudicarla a la mencionada sociedad, especializada en el sector de vending (máquinas de bebidas y otros productos) y que ahora vuelve al ámbito más puro de la hostelería, donde también trabajaron con anterioridad, explica Leandro Núñez. «Hemos pensado que se podía hacer algo por la ciudad y nos hemos decidido. Vamos a ver qué tal sale. Nuestro objetivo -añade Núñez- es dinamizar aquel entorno que como se sabe está un poco aislado, llevar gente hasta allí y comprobar cómo funciona».

La limpieza y el mantenimiento de este espacio también serán asumidos por la citada empresa, que fue la única que se presentó al concurso, tal y como informó ayer el Ayuntamiento.

Además de música en directo, la empresa propone bailes y otras iniciativas dedicadas a los mayores de la ciudad las tardes de los sábados y domingos, así como payasos, cuentacuentos y espectáculos circenses para los pequeños durante las mañanas de estos dos días.

«Hay que desarrollarlo, esa es la idea que se ha presentado al Ayuntamiento, pero hay que concretarlo», afirma Núñez, quien en cualquier caso recuerda que el Embarcadero «es sobre todo un espacio de oficinas y, por tanto, no se puede ofrecer nada que sea ni muy ruidoso ni muy molesto. Pueden ser cosas de pequeño formato, que también sirvan de oportunidad a muchos artistas que hay».

Desde su apertura, en marzo del 2011, el Embarcadero ha acogido exposiciones, mercadillos y desfiles de moda, pero solo de forma ocasional. La cafetería ha permanecido cerrada. Sin embargo, la implantación del centro de excelencia y otras instituciones hacen aconsejable disponer de un espacio de hostelería, a lo que se añade la oferta lúdica para dinamizar el entorno.