El aforo de la piscina de San Roque se queda pequeño los días de calor

Ya lo dijo hace meses Ramón Olivenza, el presidente de la asociación de vecinos de San Roque. La piscina de verano que estrenaron la temporada pasada es de lo que más ha gustado en el barrio en los últimos años.

Las instalaciones que funcionan junto a la climatizada se llenan casi a diario y los días de mucho calor, el aforo se completa en pocas horas.

El pasado jueves, en mitad del puente de agosto y con más de 30 grados antes del mediodía fue la última vez que se arrebató. Entre la una y las dos de la tarde, según cuentan desde la piscina, ya habían pasado por las taquillas con entrada individual o bono las 200 personas que puede acoger el recinto.

Bastaron dos horas para completarse. A los que llegaron después , todavía les quedó la alternativa de la Granadilla, que con un aforo de 800 bañistas no suele colgar el cartel de completo.

En San Roque ya no sorprende que la piscina se quede pequeña. Los fines de semana de julio muchos tuvieron que darse la vuelta porque cuando fueron ya se había llegado al máximo de capacidad. Trabajadores del recinto cuentan que incluso algún día de diario también se ha rozado el completo. Aunque se trata de una instalación de barrio, su principal atractivo pasa por los doce metros de espacio para que se bañen los niños más pequeños. En un principio, el proyecto sólo contemplaba el vaso de 25 metros, pero el Ayuntamiento prefirió retrasar su apertura y renunciar a la temporada de 2011 porque quería sumar un área infantil por la demanda que tienen estos espacios.

Por lo que cuentan en la piscina, cada vez vienen más padres con niños pequeños y es muy probable que se superen lo datos de afluencia del año pasado.

Según los datos de la Fundación Municipal de Deportes, hasta 13.431 usuarios accedieron al recinto entre el principio de junio y septiembre de 2012. De media, supone, algo más de 145 bañistas, lo que porcentualmente equivale al 70%.

El éxito de la piscina no solo se mide por las veces que llega al aforo máximo. Cada día, antes de abrir, ya hay varios bañistas esperando a que abran las instalaciones.

Manuela Sánchez pasó ayer por Ricardo Carapeto con su familia. Como el resto de las madres, agradece el espacio acotado para los más pequeños. «Yo vengo por ellos».

Hace pocas semanas además se estrenó el servicio de bibliopiscina, en la Granadilla lleva funcionando hace trece años y el Consistorio, ante la afluencia de niños y bañistas a San Roque decidió también incorporarlo a la piscina de Ricardo Carapeto.

Para poder disfrutar de los prestamos (libros, revistas, prensa del día o juegos lúdicos), el bañista tan sólo tiene que dejar en depósito un objeto personal y devolverlo antes de la hora de cierre. El horario es de 12.00 h a 14.30 h y de 18.00 a 20.30 horas. Para los niños más pequeños se han organizado algunos cuentacuentos con monitores para que hacer más entretenida la estancia.

María del Carmen se ha convertido en este mes de agosto en una asidua. Con la experiencia, ha aprendido que el aforo máximo de la piscina llega hasta las 200 personas. Lo dice una y otra vez en la cafetería por lo que le pasó el pasado jueves. Ese día llegó a las seis y media y en la recepción le dijeron que ya había doscientas personas dentro y no podían entrar más. Podía esperar a que saliera algún grupo o irse hasta la Granadilla, pero decidió darse la vuelta y marcharse a casa porque entre esperar o coger el coche para ir hasta la otra punta de la ciudad iba a perder mucho tiempo y ya no merecía la pena pagar los cuatro euros .

Hay quien ya ha le ha pasado lo mismo que a María del Carmen y actúa con cierto precaución. José María Ortiz, un jubilado que va casi a diario, le aconseja a sus vecinos que vayan antes de comer, porque a partir de las cuatro ya cuesta moverse por el agua entre tantos bañistas. A José María no le sorprende el éxito de la piscina porque en invierno con la climatizada ocurre lo mismo. «Te tienes que salir de algunas calles porque te tropiezas con la gente».

El overbooking tan habitual estos días en San Roque no se repite en la Granadilla. Allí es más difícil llegar a la ocupación máxima porque tiene el doble de aforo.

Ambas piscinas estarán abiertas hasta septiembre y, por la previsión meteorológica para los próximos días, esta semana contarán con mucha asistencia.

Las dos tienen el mismo precio 3,50 euros los días de diario y cuatro los sábados, domingos y festivos. Pensionistas y menores de 17 años pagan la mitad en ambas instalaciones. En San Roque, además de la de verano, también funciona la climatizada para la natación deportiva.