Adecentan una veintena de calles que están sin asfaltar

Debe ser uno de los puntos débiles, por no decir, a veces vergonzante, que tienen muchas ciudades y Almendralejo, quizás aún más teniendo en cuenta la anarquía urbanística que se sufrió durante muchos años, hace ya décadas. Se trata de las calles que siguen sin asfaltar dentro del casco urbano.

El caso de Almendralejo, además, se agrava porque varias de esas calles sin asfaltar están en pleno centro, a pocos metros del centro comercial y administrativo y ahora incluso turístico.

Aunque se trata de un problema difícil de solucionar, teniendo en cuenta el coste que supone su asfaltado, sí se está intentando, al menos, mejorar en algo su imagen. La solución definitiva sólo pasa por el asfaltado financiado mediante contribuciones especiales o que sean los propios vecinos los que lo urbanicen y cedan al ayuntamiento.

A la espera de ello, la Delegación de Obras ha estado arreglando muchas de esas calles durante el verano, tiempo en el que se han adecentado mediante relleno y compactado hasta 19 viales públicos. En total, se ha actuado en más de 33.300 metros cuadrados.

Las calles han sido el segundo tramo de la calle Granados, Harninas, Solana, Lobón, Torremejía, Júcar, Miño, Guadajira, Tajo, Guadiana, Ebro, Santo Tomás, San Bartolomé, San Mateo, Casetones (parcialmente), San Lucas, Fernando Villalobos, San Juan y Diego Pérez Rangel.

El arreglo se ha hecho por parte de la empresa Sani, a la que se le cedió la gestión del arreglo de caminos y espacios públicos de la ciudad, puesto que la partida por la que se le adjudicó permite también invertir en estas vías públicas.

Aunque ahora se ha actuado sobre lo que se denomina 'Barrio Maldito', o lo que es lo mismo, los alrededores de la calle Alberca, la intención es seguir por otras zonas de la ciudad. Y se hará aprovechando el parón que la empresa Sani está obligada a hacer de arreglo de caminos, al llegar la vendimia y la campaña de la aceituna.

Además de la zona de la Alberca, también se ha arreglado el vial que une el centro de transportes y la avenida de Europa, así como otras calles residenciales como Navalmoral de la Mata o Arroyo de la Luz.