Dos familias protagonizan una batalla campal a las puertas de los juzgados

Dos familias que acompañaban a una pareja que había sido citada en el juzgado de violencia de género de la avenida de Colón protagonizaron ayer por la mañana una violenta pelea en la que incluso llegaron a ser utilizados como armas arrojadizas los cascos de los motoristas de la Policía Local, que fueron arrancados de las motos que permanecían aparcadas a las puertas de los juzgados.

El suceso se produjo a las 10.30 de la mañana junto a la sede de la Audiencia. A primera hora de la mañana ya se había producido un enfrentamiento verbal, pero fue a esa hora cuando las dos familias comenzaron a golpearse. Testigos presenciales explicaron que se formaron varios grupos y que «llovieron» los puñetazos y los golpes.

Algunas de las personas que participaban en la pelea incluso golpearon a sus oponentes con los cascos de los motoristas de la Policía Local, elementos de protección que arrancaron de sus motocicletas oficiales aprovechando que estaban estacionadas a las puertas del edificio mientras los agentes participaban en un juicio que se celebraba en la tercera planta de los juzgados.

Fueron esos policías locales quienes primero bajaron a la calle para intervenir junto con varios funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía que acudieron prestos al aviso. Junto a ellos estaban los guardias civiles que controlan los accesos a los juzgados.

Cuando llegaron los policías ya se habían producido las escenas más violentas: carreras, empujones, puñetazos, golpes con los cascos e incluso una pelea cuerpo a cuerpo en los viales de la avenida de Colón que impidió el paso de vehículos.

En poco más de cinco minutos se reunieron en la zona los motoristas que patrullan la calle Menacho y media docena de coches patrulla del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local. En total, entre 25 y 30 agentes que separaron a las familias.

Trasladada a comisaría

La fuerte presencia policial no evitó que algunas de las personas enfrentadas siguieran causando incidentes, razón por la que los policías se llevaron a una chica que fue identificada en la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía antes de ser puesta en libertad.

La Jefatura Superior de Policía confirmó a última hora de la mañana que no se había producido ningún herido y que tampoco había habido detenciones. Durante el resto de la mañana, la presencia policial se reforzó en la zona.

Una funcionaria con larga experiencia en los juzgados pacenses aseguró que jamás había visto una pelea tan violenta en la sede judicial. Otra se preguntaba qué habría sucedido si el juzgado hubiese estado ya en la Ronda Norte. «Ahora mismo la Policía tarda un segundo en llegar. Cuando estén en San Roque no será tan fácil».