Los aparcamientos enfrentan a los vecinos de Cáceres el Viejo

Ha tenido que esperar un año, pero Enrique al fin puede entrar en su casa. Suena a broma, aunque es la pura realidad. Una noche de agosto de 2012 llegó a su vivienda en la urbanización Cáceres el Viejo y comprobó que un coche aparcado a la puerta le impedía acceder. Era una situación con un punto de surrealismo evidente, puesto que Los Geranios es una vía peatonal. En ella los vehículos solo circulan para entrar o salir de los garajes.

El caso se contó en una información publicada por este periódico respecto a la 'reconversión' de algunas calles: de peatonales a ser aptas para la circulación. La Policía Local, entonces, no intervino, pese a las denuncias presentadas, por una sencilla razón: las señales de tráfico habían desaparecido. Unas arrancadas, otras por los suelos.

Un año después Cáceres el Viejo vuelve a ser noticia. Sus calles peatonales ya tienen las señales en su sitio. Enrique, pese a todo, seguía teniendo dificultades para entrar en casa. El caso volvió a la Policía Local. La última vez el pasado 4 de septiembre. «Desde hace bastante tiempo los vecinos de los números pares tenemos problemas con los vehículos que nos estacionan delante de las puertas», se lee en el relato de lo sucedido que Enrique Navarro trasladó a los agentes. «Estos hechos han sido denunciados en varias ocasiones», añade.

Las llamadas al 092, al concejal de Tráfico, al jefe de Policía... Algo tan sencillo como cruzar la entrada de su hogar se convirtió para él en una aventura. Aunque la vía es peatonal, lo normal era que los conductores dejasen sus coches en la calle. Eso sí, por pura responsabilidad, procuraban que no molestasen a otros vecinos. Las excepciones han llevado ese escenario al extremo. «La cuestión es que no todo el mundo respeta a los demás. Los hay que dejan el vehículo donde les parece. Ni se preocupan de si molestan o no. De ahí viene la denuncia de este afectado», explica el presidente vecinal, Manuel Iglesias.

Enrique agotó su paciencia cuando observó que los agentes no acababan de darle al asunto la importancia que requería. «Al ser la tercera denuncia formal que se presenta sin haber hecho nada al respecto no quedará más remedio que acudir a los Juzgados», avisa en su último escrito presentado.

Cumplir la ley

Fuentes de la Policía Local reconocen que su caso está perfectamente argumentado. En Cáceres el Viejo no había problemas mientras los vecinos estaban de acuerdo entre sí. Una vez que los hay que entorpecen el paso de personas con sus coches mal aparcados, los agentes se ven obligados a actuar. Y lo han empezado a hacer de verdad.

«Lo que se ha hecho es cumplir la ley. Esas calles son peatonales. No se puede aparcar», confirman desde la Policía. «No hay excusa posible puesto que las señales ya están repuestas. La Policía Local esta actuando, tarde, pero está vigilante», admite aliviado el propio Enrique.

Por ahora lo está haciendo en Los Jazmines y Los Geranios. Las batidas las han despejado de coches. Algunas multas llegan a 300 euros. La asociación vecinal, preocupada por el asunto, ya ha mandado un escrito al Ayuntamiento.

«He hablado con el concejal de Tráfico, y esperamos que esto se solucione. Y si no se puede aparcar, que sea así en todas las calles peatonales. Lo que nos inquieta es que ha habido enfrentamientos ya», añade el presidente del barrio.

Cáceres el Viejo celebra estos días sus fiestas. Lo hace con una imagen inédita, algunas calles sin rastro de coches.