«Perú no podía estar al margen de las Méridas del Mundo»

Francisco Martinotti es un empresario peruano que cuenta con más de 2.000 trabajadores en sectores como confección, química, agricultura y agroindustria y en países como Perú, Colombia, Panamá, Chile y Estados Unidos. Ha sido directivo de las principales asociaciones empresariales del país, y en la actualidad preside la entidad Fogapi, que avala a pequeñas y medianas empresas peruanas. En las últimas semanas ha estado en Extremadura por motivos personales, lo que ha aprovechado para acercarse a Mérida de cara a su participación en la próxima edición de la Feria de las Méridas del Mundo, que se celebrará en octubre. Estuvo reunido con Jorge Gruart, presidente de Aeme y uno de los organizadores de la muestra.

Martinotti destaca que «Perú no podía estar al margen» de la línea de colaboración creada entre las Méridas del Mundo, ya que implica una vía de comunicación entre Hispanoamérica y Europa.

Según indica, este tipo de colaboración se puede llevar a cabo a través de alianzas empresariales o mediante acuerdos de Estados. A su juicio, es preferible la primera vía, ya que «los empresarios tenemos el mismo espíritu emprendedor», mientras que el sector público debe trabajar como mero facilitador de esos contactos.

Para Martinotti, la experiencia europea es muy válida para América latina en cuestiones como la organización del trabajo y la producción. Por su parte, los países latinoamericanos ofrecen un mercado emergente con crecimientos cercanos al 6% al año.

Con ese objetivo, las empresas hispanoamericanas tienen en la Feria de las Méridas del Mundo una oportunidad para adentrarse en el mercado europeo. «España puede ser nuestra gran plataforma de ingreso de nuestros productos en Europa», afirma. Y, a la inversa, Mérida puede ser el lugar donde los europeos, en plena crisis económica, pueden encontrar una salida a sus negocios al otro lado del Atlántico.

Como ejemplo, señala que en Perú cuentan con un algodón de gran calidad. «Pero me está haciendo falta diseño», lo que espera encontrar en Europa. Y, en el otro sentido, el crecimiento del sector inmobiliario en Latinoamérica ofrece una oportunidad de negocio a las debilitadas empresas de la construcción de nuestro país.

Por ese motivo, acudirá el próximo mes de octubre a la capital extremeña junto con una nutrida delegación de empresarios peruanos para participar en el Foro de las Méridas del Mundo.