Ocho años y medio de prisión por el tiroteo de la calle Benegas

Ocho años y medio de cárcel y siete años sin poder pisar la ciudad de Badajoz es la pena con la que se conformó ayer Andrés S. S. tras reconocerse autor del tiroteo de la calle Benegas, un grave suceso en el que el ahora condenado realizó varios disparos con la intención de herir a los miembros de una familia con la que estaba enfrentado.

Un fuerte dispositivo policial veló ayer para que no se produjeran nuevos enfrentamientos entre los dos clanes enfrentados. Sin embargo, no fue necesaria la intervención de los agentes y ambas familias mantuvieron una conducta correcta en los minutos previos a la vista, que había sido señalada para las diez de la mañana.

A esa hora fue negociada una sentencia de conformidad entre el representante del Ministerio Fiscal; el abogado de la acusación, Juan Carlos Bodes; y la letrada que defendía al acusado, María José Malagón. La Fiscalía y la acusación particular pedían 14 años y 6 meses de prisión para el acusado, pero en el plazo de media hora se alcanzó un acuerdo que fijó la condena en ocho años y medio de cárcel.

Según se recogía en la calificación previa de los hechos, Andrés S. S. irrumpió el 21 de septiembre de 2011 en la calle Benegas, donde «sabía que estaban reunidos diversos miembros de una familia con la que estaba enemistado por un incidente entre sus hijas menores» y «haciendo uso de, al menos, dos pistolas cargadas, comenzó a disparar indiscriminadamente contra los miembros del grupo, sin importarle que alguien resultara muerto o herido, mientras la familia emprendía la huida».

Un miembro de la familia que estaba recibiendo los disparos se puso enfrente y «con las manos en alto le dijo que lo dejara», pero el acusado no atendió su requerimiento y le disparó en el costado. Una vez que la víctima estaba en el suelo y «con intención de acabar con su vida, continuó disparándole, impactándole en otras dos ocasiones».

Por este homicidio en grado de tentativa, Andrés. S. S. ha sido condenado a 5 años y 6 meses de prisión, con lo que se rebaja en 2 años y 6 meses la petición inicial hecha por la Fiscalía. Además, se le obliga a indemnizar a la víctima de esos disparos con 62.200 euros (15.347 por los días de curación de las lesiones y 41.200 por las secuelas).

La sentencia también señala que el condenado no podrá acercarse al hombre contra el que disparó, ni tampoco a su cónyuge, a sus hijos, padres y hermanos durante el plazo de siete años . También se le impide residir en la ciudad de Badajoz.

En ese mismo tiroteo resultaron heridas otras dos personas. Una de ellas era un varón familiar del primer herido, que recibió un disparo en el tobillo, mientras que el otro era un vecino al que una bala le atravesó el cartílago de la oreja sin causarle lesiones graves.

El primer disparo ha sido considerado una falta de lesiones por la que se imponen 12 días de localización permanente, mientras que el segundo ha sido finalmente valorado como un delito de lesiones castigado con 2 años de prisión.

La condena se completa con otro año de prisión por tenencia ilícita de armas.

Para Juan Carlos Bodes, abogado de la acusación, la sentencia de ayer es positiva porque, durante el plazo de siete años, impide al acusado regresar a la ciudad de Badajoz en el hipotético caso de que se beneficie de algún permiso carcelario.

También la letrada que defendía al condenado, María José Malagón, consideró positiva la rebaja de la pena y el hecho de que a partir de hora su defendido pueda obtener los beneficios penitenciarios que se contemplan para las personas que hayan cumplido la cuarta parte de la pena de cárcel.