Santa Ana, casi a punto

Después de más de dos años terminado y cerrado, en el centro cultural de Santa Ana vuelve a haber movimiento. Las instalaciones rehabilitadas y preparadas para albergar una biblioteca se han llenado estos días de cajas y enseres. Esta semana han empezado a colocar todo el mobiliario en el interior del inmueble asentado en pleno corazón del Casco Antiguo. Varios operarios se han dedicado a montar muebles, estanterías, mesas y cajoneras que en muy poco tiempo estarán llenas de libros, revistas, Cd's y DVD's, entre otros artículos.

Aunque los vecinos no saben cuánto tiempo más deberán esperar para disfrutar de este servicio, ahora parece que la apertura está un poco más cerca. Desde el Consistorio pacense aún no han facilitado la fecha concreta para su puesta en marcha, pero indican que este servicio cultural «empezará a funcionar de manera inminente».

De hecho, el inmueble está siendo acondicionado esta semana y se espera que en los próximos días también comiencen a depositar los fondos bibliográficos y documentos (libros, revistas, películas, etc), ya que el Ayuntamiento ya dispone de este material y está listo para ser colocado, al igual que los equipos informáticos.

En varias ocasiones tanto el grupo municipal socialista como la asociación de vecinos del Casco Antiguo han reclamado la apertura del centro. Fue en 2008 cuando el Ayuntamiento anunció el proyecto definitivo que planteaba convertir este antiguo mercado de abastos en una biblioteca y espacio social. Se tratará de la única biblioteca que quedará en el centro de la ciudad después del traslado de la Bartolomé J. Gallardo a la barriada de La Paz.

La rehabilitación de este inmueble arrancó en 2009 con el dinero del primer Plan E, pero el Consistorio tuvo que pedir una prórroga debido a que las obras se retrasaron. La recuperación de este edificio continuó con fondos del segundo Plan E. A través de estas líneas de financiación se destinaron alrededor de 1,5 millones de euros. A esta cantidad hay que sumar los gastos que el Gobierno local ha aprobado para dotar al centro de muebles y recursos, además de personal. Su restauración y arreglo finalizó en el verano de 2011 y desde entonces las puertas permanecen cerradas.

La situación está generando diversos desperfectos en este edificio que ni siquiera se ha estrenado. Su inutilización está acelerando su deterioro. El aspecto exterior del edificio ha empeorado. Han aparecido humedades y en las paredes y en los cristales ya se aprecian pintadas.