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S. L.
Viernes, 18 de octubre 2013, 09:46
Contrató un tratamiento de ortodoncia para que le alinearan diversas piezas dentarias, y le hicieron tal destrozo en la boca que no puede hablar o reírse con naturalidad. Eso es lo que afirma el titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Cáceres que ha condenado a un año y seis meses de prisión a la gerente de la Clínica 'Cáceres Vital SL' en la que contrató la ortodoncia, y la misma pena para la dentista que le atendió.
La sentencia considera que las dos son responsables de un delito de lesiones causadas por imprudencia profesional grave, prohibiéndoles hacer su trabajo durante un año y seis meses. Ambas deben indemnizar con 120.000 euros a la que fue su cliente, ayudándoles en el pago la compañía de seguros que tiene contratada la clínica, y en su defecto, la empresa. La sentencia no es firme, ya que puede ser recurrida en la Audiencia Provincial.
Para intentar alinearle varios dientes, le quitaron las cuatro muelas del juicio y tres premolares, pero no le quitaron un colmillo que según la sentencia desaconsejaba la intervención que le efectuaron, lo que hizo que los dientes se torcieran cada vez más. Al final también le quitaron ese colmillo y otro diente.
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