Laureano León asegura que ya ha llegado el momento de invertir

Día festivo en la Diputación de Cáceres, que adelantó la celebración de su patrón y el de todos los extremeños, San Pedro de Alcántara, para facilitar la asistencia de los protagonistas de la jornada: 17 trabajadores de la institución jubilados durante este año. En el acto institucional que se celebra en el Palacio Provincial no faltaron, un año más, representantes del Gobierno extremeño, el Consistorio, de la Policía, del Ejército o de la cultura, entre otros ámbitos.

Después de que la banda de la Diputación interpretara el himno extremeño, el presidente de la institución, Laureano León, comenzó su discurso recordando que la crisis ha exigido muchos sacrificios. «Reconozco que he tenido que tomar decisiones difíciles, pero a los políticos se les exige un papel activo. Hay que hacer y hay que decidir», introdujo, valorando también el esfuerzo de los empleados públicos. «Gobierno y trabajadores hemos hecho un esfuerzo. Hemos hecho nuestro el concepto de corresponsabilidad», señaló el presidente.

Pero es hora de mirar hacia adelante. Así se podría sintetizar la filosofía de su discurso, en el que definió los dos años de legislatura como «complicados» y «duros», pero en el que también avanzó inversiones para el próximo año. La Diputación presentará para 2014 un presupuesto «expansivo» que ayude a la recuperación económica. «Si ahora se puede invertir en nuevos proyectos es gracias a los esfuerzos que se han realizado a lo largo de los dos primeros años», apuntó.

León citó varios planes que se están poniendo en marcha para mejorar infraestructuras, en total, más de 52 millones de euros que se invertirán en los municipios de la provincia. «Pero no todo va a ser infraestructuras. También vamos a apostar por otros proyectos, culturales o turísticos, que también contribuyen a generar riqueza», afirmó.

A este respecto, habló de iniciativas para acercar la Diputación al ciudadano, como el sistema en la página web para que las personas sordas tengan acceso a sus servicios, y de inversiones para dinamizar comarcas como Sierra de Gata, espacios como el Parque de Monfragüe o proyectos como el Tajo Internacional o la creación de un centro de documentación. Todo, de cara al año próximo.

«Sería un error perder la perspectiva de futuro», sentenció el responsable. Asimismo, la institución tendrá que afrontar la reforma de la Administración Local, que según León refuerza el papel de la Diputación como «garante» de los servicios para los municipios de menos 20.000 habitantes. «Queremos dar la espalda definitivamente a la crisis. Hay mucho por hacer, pero creo que lo vamos a conseguir», añadió.

Tras el discurso, el presidente dio paso al homenaje a los trabajadores jubilados. Este año son 17 los empleados que recibieron el reconocimiento de la institución. El más antiguo es José Mangut Muriel, arquitecto técnico del Palacio Provincial que se jubila con 41 años de servicio a sus espaldas y que se llevó una gran ovación del salón de plenos cuando acudió a recoger su obsequio. «Lo echo mucho de menos. Me encuentro bien físicamente y los compañeros ya son amigos. Para mí, la jubilación ha sido un paso muy duro», cuenta.

Y es que la mayoría de los homenajeados tenía ayer sensaciones contrapuestas. «Estoy encantada y a la vez, me ha dado mucha pena porque el trabajo era muy entretenido y los compañeros, excelentes», explicaba Florencia Jaraíz, que ha estado 37 años trabajando como ordenanza en el Palacio Provincial. «Pero hoy es un día para celebrar, ha sido muy bonito trabajar aquí», remata.

Antonio Luis Suárez ha sido director del Conservatorio de Música García Matos, de Plasencia, y acumula 30 años de antigüedad. «Este momento es muy especial. En realidad, no quiero tener la edad que tengo, pero se dice que los músicos siempre están en activo», resalta. Además, se da la circunstancia de que su hijo le sucederá en el cargo. «Me hace mucha ilusión», confesó.

La jornada comenzó con una procesión de la Corporación provincial. En compañía de los maceros, los diputados recorrieron la distancia entre el Palacio Provincial hasta la Concatedral de Santa María, donde se celebró la tradicional liturgia. La misa fue oficiada por el obispo de la Diócesis de Coria-Cáceres, Francisco Cerro, y contó con la participación de la Banda Sinfónica de la Diputación.