Domingo de solidaridad, con ruta en bici y paellada

El festival benéfico en apoyo de Dailyn no fue el único acto de solidaridad celebrado ayer en la capital cacereña. Se puede decir que fue un domingo verdaderamente solidario, con la gala de la niña y, además, una ruta ciclista por la donación de órganos y tejidos y una paellada para recaudar fondos con destino a la labor que realiza una asociación de terapias para la integración de discapacitados, Aztide.

La primera actividad que se celebró fue la convocada por Alcer, la asociación de lucha contra las enfermedades renales de Cáceres. Había organizado las II Pedaladas Solidarias, en la que participaron 400 personas, tanto adultos como niños, el mayor de 87 años y el más pequeño, de tres. Se trataba de hacer un recorrido en bici de 12 kilómetros. La inscripción costaba dos euros, por lo que la asociación ingresó 800 euros con la aportación de los ciclistas, aunque la actividad no tiene un objetivo de recaudación sino de concienciación a la población sobre la necesidad de la donación de órganos. También se hace «para que los paciente sientan el apoyo de la gente que pedalea mientras ellos están esperando una donación», afirma José Antonio Sánchez, presidente de Alcer. En Extremadura hay más de 200 personas que esperan un transplante, entre ellos 150 de riñón.

El recorrido partió del Quiosco de la Música de Cánovas y continuó por diversas calles de la ciudad hasta volver al lugar de partida, sobre las 13 horas. La alcaldesa, Elena Nevado, intervino en el inicio de la actividad y leyó una carta anónima de un donante, una hija que explicaba los beneficios conseguidos con la donación de los órganos de su madre fallecida, lo que supuso garantizar la vida a otras siete personas.

La paellada solidaria se celebró en el restaurante 8º Arte, de la calle General Ezponda, y sirvió unas 200 raciones, que se vendieron a un euro.