

Secciones
Servicios
Destacamos
MARÍA JOSÉ TORREJÓN
Domingo, 8 de diciembre 2013, 11:01
'Vapear'. Es el término de moda. Todavía no aparece en los diccionarios pero ya está en la calle. Y arrasa. Sobre todo, entre los usuarios del cigarrillo electrónico, ese nuevo dispositivo que ha llegado al mercado anunciado como un método para dejar de fumar. Simula un cigarrillo convencional. Pero en lugar de emitir humo, desprende vapor. De ahí que se 'vapee' y no se fume. Parece haberse convertido en el negocio del momento. También en Cáceres. En los últimos tres meses se han abierto en el centro de la ciudad dos tiendas dedicadas específicamente a este producto. También se ha instalado un 'stand' en el centro comercial Ruta de la Plata y se promociona en locales de diversa naturaleza: desde tiendas especializadas en artículos para el fumador hasta bazares chinos.
El sector sanitario mira con desconfianza el producto, ya que todavía no existen estudios exhaustivos sobre sus posibles efectos. Y en Cataluña lo han prohibido en sus edificios públicos y también quieren extender este veto a bares y restaurantes. Mientras tanto, hay fumadores, como Isabel Barrientos, que han depositado sus expectativas en el producto para aparcar su adicción al tabaco. «Quiero dejar de fumar porque me asfixio. Hace un mes que utilizo del cigarrillo electrónico. Lo uso a diario», cuenta. Para ella, el dispositivo solo tiene ventajas. «Yo noto que estoy reduciendo el consumo. Aunque tenga nicotina, te evitas el alquitrán. Lo que yo digo es que nunca será tan malo para la salud como el cigarrillo normal. Además, evitas que la casa huela a tabaco, es más cómodo, más práctico y más económico que los paquetes de toda la vida. Lo peor es que puede crear nuevos fumadores porque está muy rico», indica desde la tienda de cigarrillos electrónicos situada en la calle Profesor Rodríguez Moñino.
La encargada de este establecimiento es Cristina Mejuto. «La gente ha puesto el cigarrillo electrónico de moda porque es un método para ayudar a dejar de fumar. Pero también hay usuarios que, como es más barato y lo ven algo más saludable, han optado por utilizarlo», cuenta. En esta tienda el kit de iniciación cuesta 19,95 euros. Incluye el cigarrillo o pipa como tal, el cargador y un líquido, que puede llevar o no nicotina. Cada cigarrilo consta de un atomizador, que es el encargado de generar una temperatura cercana a los 600 grados centígrados. Este calor provoca una combustión y es el responsable de crear la nube de vapor. «Tenemos comprobado que nuestra clientela consigue dejar de fumar. Conozco muchos casos», asegura Mejuto.
Mientras tanto, desde el sector sanitario se trata de arrojar más luz sobre este fenómeno y, sobre todo, de su incidencia sobre la salud. El próximo año la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, a través de su grupo de tabaquismo, realizará un estudio nacional para abordar la eficacia y seguridad del cigarrillo electrónico. Y Cáceres participará en este proyecto.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.