Adjudicada la sede de servicios sociales con una rebaja de más de cien mil euros

Todavía habrá que esperar a que los técnicos revisen el proyecto para asegurase de que no hay baja temeraria, pero si todo está en orden la empresa Servicios y Técnicas Casamore S.L., con sede en La Coruña, será la encargada construir la segunda fase del edificio del centro de servicios sociales de base.

La mesa de contratación del Ayuntamiento propuso ayer adjudicar la obra a esta empresa gallega, que se compromete a realizar los trabajos por 298.618 euros, una cantidad muy por debajo de los 402.701 euros por los que salió a licitación. La mesa ha elegido el proyecto de Casamore S.L. por delante de los presentados por otras 18 empresas.

El edificio, que se encuentra situado entre Carrefour y el parque La Mazuela, deberá estar terminado en el plazo de cinco meses desde el momento de la adjudicación. La obra consiste en rematar lo que ya se ha dejado a medias por dos veces, primero cuando en 2007 finalizó la primera fase y no hubo continuidad, y más recientemente cuando en 2012 el actual gobierno adjudicó la conclusión y la empresa abandonó.

Todos estos retrasos e incumplimientos han provocado que lo que falta por construir no pueda financiarse ya con cargo a programas europeos, de modo que los casi 300.000 euros que finalmente va a costar terminar el edificio van a salir de los fondos propios del Ayuntamiento.

La obra que se pondrá en marcha próximamente consiste en urbanizar la parcela, construir los accesos con una rampa, cerramientos, conducciones, climatización, ascensor y acabados interiores, todo ello imprescindible para que el edificio pueda entrar en funcionamiento. En la planta se instalarán los servicios sociales de base que actualmente se encuentran en el segundo piso del edificio consistorial. El anterior gobierno del PSOE tenía previsto dedicar la segunda planta a oficinas de desarrollo económico, pero finalmente en ella se ubicarán servicios relacionados con la asistencia social.

Los casi 300.000 euros de esta segunda fase se suman a los 600.000 de la obra inicial más otros 50.000 que certificó la empresa que abandonó en 2012, por lo que el coste final del edificio se va a disparar hasta los 950.000 euros.