

Secciones
Servicios
Destacamos
SERGIO LORENZO
Martes, 11 de febrero 2014, 10:07
«Fue horrible, mucho peor que lo que se ve en las películas», comenta Andrea Castaño, vecina del 6º B del número 8 de la calle Cristu Benditu, al recordar el incendio que tuvo lugar el domingo por la mañana en la vivienda de al lado, en el 6º C, que obligó a desalojar el edificio. Lo comenta con otros vecinos, en el rellano de la escalera, entre olor a humo, con los techos tiznados de negro y la puerta del 6º C precintada.
En el piso que comenzó a arder a las diez de la mañana vivía el matrimonio formado por Avelino y Margarita (de 65 y 64 años) y la madre de ella Leonor, de 94. «Margarita me vino a avisar de que había fuego en su casa, que su madre había encendido el brasero, que habían salido chispas por un cortocircuito y comenzó el fuego. Su marido intentó apagarlo, pero ya estaban las llamas por las cortinas y por todos los lados».
Julia Lancho, que vive en el 6º B con su marido y dos hijos, recuerda que salieron a toda prisa del bloque, «cuando salimos del piso un cacho del techo le cayó a mi marido. La verdad es que los bomberos vinieron enseguida y también la policía. La alcaldesa también vino, y se portó muy bien, nos dijo que si hacía falta algo se lo dijéramos. Yo tenía miedo por el gas natural».
Felisa Iglesias, que vive en el octavo (el edificio tiene once alturas), señala que tuvieron suerte porque el aire no llevaba el fuego para el edificio, «las llamas podían haber hecho mucho más daño».
Cada planta tiene cuatro viviendas y la mayoría de ellas fueron desalojadas. Relatan que la gente empezó a usar los teléfonos para pedir ayuda, «llamaron al 112 -cuenta Andrea-, que a mí mi hijo me ha dicho que cuando pasa algo hay que llamar al 112 y ya está. La verdad es que fue un horror, yo por la tarde aún lloraba recordando lo que habíamos pasado».
Se muestran preocupados por lo que les ha ocurrido a los vecinos del 6º C. Avelino y su suegra fueron llevados al hospital San Pedro de Alcántara, y a las pocas horas le dieron el alta. Les han dicho que la mujer mayor se ha ido a vivir con otra hija, y que el matrimonio está con uno de sus dos hijos, «les hemos llamado al móvil, pero no lo cogen, yo creo que con las prisas se dejaron el teléfono dentro y estará quemado», afirma Andrea.
Aún recuerdan las imágenes del fuego saliendo de dos ventanas, «las del comedor y de la cocina, ahí estará todo quemado, igual que la entrada», dice Julia. El seguro del edificio arreglará los desperfectos en la escalera, y esperan que el piso afectado tenga otro que cubra los daños que han tenido. También ha sido algo afectado el piso inmediatamente superior, el 7º C, al quemarse persianas y aparatos de aire acondicionado. No vive nadie. Está en venta.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones de HOY
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.