Las pequeñas guerreras del Badajoz

Las más pequeñas del CF Femenino Badajoz entrenan martes y jueves en el Pabellón Juancho Pérez. Bajo su renovado techo se preparan con ilusión para un campeonato en el que sus dos benjaminas (A y B) compiten con diez equipos de chicos y el Santa Teresa G. Pero este martes recibieron una visita sorpresa. Casi ninguna de estas niñas de entre 8 y 10 años podía imaginarse que el ilustre deportista pacense que da nombre al pabellón se acercara a verlas en persona, compartiera algunas anécdotas de su laureada trayectoria internacional de balonmano y les diera una serie de consejos.

Las chicas quedaron entusiasmadas al conocer de cerca a un referente del deporte extremeño de esta última década. Un espejo donde mirarse y que les indicó una máxima básica para su desarrollo integral. «El deporte está muy bien y nos lo pasamos genial, pero hay dos cosas muy importantes que debéis tener en cuenta para practicarlo, los estudios y la alimentación», recomendaba Juancho Pérez. De comer sano y bien sabe, y mucho, el televisivo cocinero Javi García, padre de Lucía, una de las niñas que integran el benjamín A, e impulsor de una página en Facebook en la que cada semana dedica un perfil a una de las futbolistas, además de actualizar de contenidos y material gráfico de los dos equipos.

Nacho Gutiérrez es el entrenador de las benjaminas del A, situadas en mitad de la tabla del grupo 6 de Badajoz y el segundo conjunto menos goleado. Todo un mérito teniendo en cuenta que compiten con diez equipos de chicos: El Tomillar, Maristas, Santa Isabel E y F, Benfica, Rayo Vallecano, Sagrada Familia, Don Bosco, San Roque y Santa Teresa F; y otros dos de chicas el Santa Teresa G, además del B blanquinegro, que cierra la clasificación y dirige su hermano Paco. Nacho confía en sus pequeñas y las ve codeándose entre los mejores. «Faltan cinco jornadas para acabar la liga y podemos quedar entre los cuatro primeros», avisa.

El secreto del benjamín del Femenino Badajoz reside en la ilusión de este joven entrenador. «Quiero crear la mejor escuela femenina de España. Es un sueño que tengo, pero creo que lo puedo conseguir y sin cobrar un duro. Estas niñas tienen un potencial enorme, algunas pueden llegar muy lejos y no voy a dejar que se pierdan porque estaré apoyándolas siempre». Nacho tuvo que dejar el fútbol cuando jugaba en el Badajoz Industrial por culpa de una lesión crónica y cogió a las benjaminas el año pasado. «Mi compañero Jose me pidió que le echara una mano y me quedé por la ilusión que me transmitían las niñas», apunta. Ahora los chicos las respetan como un equipo más. «Al principio se sorprendían, pero ya nos conocen y saben que el A es muy fuerte. El año pasado nos llamaban las peores, pero de eso nada. Gracias a su trabajo y sacrificio les llegó la recompensa de lograr una victoria y las llevé al McDonalds».

Son las pequeñas guerreras del Femenino Badajoz y las más mediáticas. Famosos como José Mercé, Huecco, Soraya Arnelas o el mago Jorge Luengo han dejado en Facebook sus mensajes de ánimo y apoyo para ellas.