La patatera vuelve a triunfar en Malpartida

Una mezcla de patata, grasa de cerdo y pimentón que revoluciona Malpartida de Cáceres y que protagoniza su día grande. Y que vuelve a triunfar no sólo entre los malpartideños, sino también entre los que cada año, se animan a disfrutar del festejo de la 'Pedida de la Patatera'. La plaza Mayor de la localidad es el punto de partida. Desde el balcón del Ayuntamiento habla Alfredo Aguilera, alcalde del municipio, para dar la bienvenida a vecinos y foráneos. «La vida son cuatro días y uno de ellos es el de la patatera», pregonó el regidor para dar paso al comienzo del pasacalles en el que participan miles de personas y que este año ha cambiado su recorrido. Incluye tres paradas: en Santa Ana, plaza de la Nora y plaza del Sol -donde el Ayuntamiento malpartideño repartió mil raciones de patatera con pan- y de vuelta a la Plaza Mayor. Se calcula que, a lo largo del día de ayer, se consumieron 1.000 kilos de este embutido y que acudieron a la fiesta una cifra estimada de entre 6.000 y 7.000 personas. Las charangas 'La 7ª Cuadrilla' y 'Son los del bar' se ocuparon de amenizar el ambiente durante el pasacalles, donde no faltó detalle alguno ni en lo que respecta a indumentarias ni en lo que se refiere a la comida. Cestas, bolsas, carros antiguos del agua e incluso, de supermercado, iban repletos de comida y bebida para que no falte el 'picoteo' en las paradas ni para vecinos ni para visitantes. En el interior, barriles llenos de hielo y bebida, neveras portátiles, embutidos varios e incluso, piezas enteras de jamones o tarros de aceitunas guisadas. Pero sin duda, el protagonismo era de la patatera y de las botas de vino.

Hoy a partir de las 19 horas la fiesta se retoma con un encuentro de comparsas, un pasacalles, una entrega de premios, una 'sardinada' y la quema de fuegos artificiales, cerrando así los actos del programa de Carnaval de la localidad. Este año, Malpartida también la Semana Gastronómica de la Patatera, que ya ha cumplido su tercera edición.

El único incidente a reseñar ocurrió en la madrugada del lunes al martes, cuando unos vándalos destrozaron uno de los escenarios, tiraron contenedores y vallas y quemaron un baño público portátil. El alcalde lamentó ayer los actos y quiso agradecer la rápida actuación de los trabajadores municipales por la mañana, que pusieron en orden la infraestructura.