El objetivo más cercano está a cuatro puntos

Tras su reencuentro con el triunfo el pasado domingo ante el Atlético Sanluqueño, el Cacereño ha dado un paso hacia adelante en el limbo de la categoría. Hasta la última jornada, el equipo de Ángel Marcos tenía a kilómetros luz cualquiera de los objetivos descifrables en esta Segunda B: playoffs, Copa del Rey y, ni qué digamos, promoción y descenso. Pero los tres puntos del domingo lo colocan con 47 en la tabla, y la clasificación para la próxima edición de la Copa del Rey está ahí cercana. A poco más de un partido.

Este curso, la Federación Española ha decidido que los próximos participantes en el torneo del KO sean todos los clubes de la LFP, los dieciocho campeones de Tercera División y veintidós equipos de Segunda B. Los clasificados de la división de bronce serán: los cinco primeros de cada grupo (sin contar a los filiales) y los dos mejores en puntuación después de estos veinte equipos. Es decir, que los dos repescados pueden ser incluso del mismo grupo si su puntuación es mayor que la de los sextos clasificados en cada grupo.

A falta de siete jornadas y 21 puntos para el final, los clasificados para la próxima edición de la Copa del Rey serían los cinco primeros de cada grupo (en el grupo II quedaría excluido el Athletic Bilbao B, por lo que se clasificaría el sexto) más la Balompédica Linense (52 puntos) y el Elche Ilicitano (51 puntos), del grupo III. O sea que el Cacereño se encuentra a tan sólo cuatro puntos de la Copa del Rey, porque el límite lo marca el conjunto valenciano. Habrá que mirar, por tanto, en el próximo mes y medio la trayectoria de los otros tres grupos. Aunque dos incisos: uno, si al Racing de Santander (líder del grupo I) no le levantan la sanción, no podrá participar en la próxima edición del torneo; y dos, hace dos temporadas el Cacereño no se clasificó y al final acabó siendo invitado.

No obstante, desde el vestuario verdiblanco sólo se mira al séptimo puesto. «Si somos octavos, el siguiente escalón es subir al séptimo lugar. No queremos pensar más allá de eso», coinciden varios miembros de la plantilla cacereña, conscientes de que la presión por la cuarta plaza les ha podido pesar en este último tramo de la temporada. Tan cierto como que la última victoria les ha aliviado inmensamente: al menos tienen algo por lo que pelear ahora. De haber perdido, no quedaría nada en el horizonte. El calendario es factible: cuatro encuentros en el Príncipe Felipe (Sevilla Atlético, La Roda, Guadalajara y Cádiz) y tres a domicilio Granada B, Cartagena y San Fernando).

El próximo será mañana en Granada (20.00 horas). Se jugará el viernes por petición del Granada B, porque su primer equipo juega el lunes de la semana siguiente a las 20.00, y el campo necesita 48 horas para respirar. Por lo que era jugar el sábado a las 16.00 horas o el viernes a las 20.00, y como al Cacereño le resultaba indiferente... pues el viernes a las 20.00.

Para ese encuentro sí estarán Toni Sánchez y Martins. No estarán todavía ni Mario Pizarraya (al que le quedan todavía una o dos semanas de recuperación por su microrrotura en el abductor), Raúl Medina (que ya está tocando balón y entrenando junto a sus compañeros) y José María Belforti (que llegó el último día del mercado de invierno, jugó de titular 54 minutos con el Albacete y desde entonces ha desaparecido por una rotura en el dedo de un pie).