Colectivos de estudiantes se movilizan para pedir mejoras en el bus urbano

«Vamos como sardinas en lata». Así lo afirma Álvaro Jiménez Martín, estudiante de tercero de Derecho de 21 años, para referirse al nivel de ocupación de los autobuses urbanos del campus en las horas de máxima demanda, entre las 8 y las 10 de la mañana. Esta queja forma parte de la relación de peticiones que formulan colectivos de estudiantes universitarios y de enseñanza secundaria junto con la Agrupación de Asociaciones de Vecinos para la mejora del servicio del transporte urbano. Los estudiantes han convocado ya una concentración de protesta para mañana jueves a las 8,15 horas, en la Plaza de América, punto desde el que parten los vehículos de la línea del campus. 'Por un autobús de calidad' es el lema de concentración.

Álvaro Jiménez es representante del colectivo Asamblea Universitaria y aclara que reclaman no sólo la mejora de la línea del campus sino también las del conjunto del servicio del transporte de la ciudad, que califican de «ineficaz» y con «graves deficiencias» en algunos casos, por la excesiva frecuencia de paso de los vehículos o por los recorridos y paradas establecidos. Por ello solicitan que no haya una frecuencia de paso de los autobuses mayor de 30 minutos.

En la relación de demandas se incluye un bono de descuento para estudiantes y jubilados. Las peticiones de mejora, además del campus, se centran en varios zonas que consideran mal atendidas, en concreto Mejostilla, Valdesalor, Rincón de Ballesteros, Residencial Universidad, la Cañada, Aldea Moret, Cáceres el Viejo y el Junquillo. Se trata de barrios que «soportan frecuencias en algunos casos de hasta 40 minutos en días laborables y cuyos recorridos y paradas no dan solución a un servicio público ineficaz». También solicitan atención al barrio de Antonio Canales, mediante un microbús y que no desaparezca el servicio de bus nocturno. Hay algunas peticiones que ya se contemplan en la nueva contrata, como la información de aviso sobre el tiempo que falta para que llegue el autobús.

La reivindicación sobre el servicio del bus parte de los estudiantes que integran la denominada Asamblea Universitaria de Cáceres y de representantes de enseñanza secundaria, colectivos que cuentan con el apoyo de la Agrupación Vecinal presidida por David Barcenilla. El escrito va dirigido a la alcaldesa y fue entregado el mediodía de ayer por Barcenilla y Jiménez en el registro del Ayuntamiento.

Sobre el campus, el escrito reconoce que la línea «está bien comunicada», pero añade que en las horas de máxima afluencia (entre las 8 y las 10 de la mañana y las 3,30 y 4,30 de la tarde) «las condiciones del servicio son pésimas, vamos ya no figuradamente sino literalmente como sardinas en lata». En este sentido, se indica que debido a la situación de «masificación en esta línea, en zonas como la Plaza de Toros y el Diocesano los usuarios tienen más difícil el acceso al servicio» mientras que en los horarios de menos afluencia «existe una arbitrariedad de frecuencia descomunal».

El campus

El campus está atendido por dos líneas, una de ellas de refuerzo. La principal cuenta con seis autobuses articulados de 153 plazas que pasan cada 7 minutos por las mañanas y cada 10 por las tardes. La de refuerzo tiene dos vehículos, que pasan cada 24 minutos. Entre las dos sumaron un millón de viajeros en 2103. En comparación con 2012, la línea dl campus perdió 10.000 viajeros y la de refuerzo 64.000. Ambas llegaron a sumar 1,2 millones en el año 2005. El servicio al campus es el que más usuarios tiene al cabo del año, seguido del que presta la línea 2, con 931.000 viajeros.

Estos colectivos manifiestan su desacuerdo con las condiciones en que se ha convocado el concurso para la nueva contrata. De hecho, en el pleno donde se aprobó abrir la licitación, el día 19 del pasado mes de diciembre, intervinieron el presidente vecinal y Álvaro Jiménez, éste último como miembro de Juventudes Comunistas. Barcenilla reclamó paralizar el concurso para favorecer el debate previo sobre la contrata con los distintos colectivos ciudadanos.