Las discrepancias por la ayuda a domicilio llegan a la Asamblea

Fue un debate prácticamente idéntico, pero cambiado de escenario. La Plataforma de afectados por la subida de la tasa de ayuda a domicilio acudió ayer a la Comisión de Salud y Política Social de la Asamblea de Extremadura y escuchó los mismos argumentos que los representantes políticos ya habían expuestos en el salón de plenos del Ayuntamiento de Cáceres. Ellos, representados por el portavoz Juan Baz, también insistieron en considerar «abusivo» el incremento de los precios. Y el resultado de momento es el mismo: los 600 usuarios del servicio de ayuda a domicilio que hay en la ciudad deberán afrontar la subida.

Como se ha informado, el pasado mes de septiembre el pleno del Ayuntamiento cacereño aprobó la subida de la tasa, que no se revisaba desde el 2002, como reconoció el propio portavoz de la Plataforma de afectados. Sin embargo, las subidas por tramos de rentas llegan a ser del 1.000%. «Estamos de acuerdo con que se revise, pero no de forma tan desproporcionada», insistió Baz, quien dijo que se perjudica «a un colectivo débil».

La diputada del PP Teresa Tortonda, argumentó que el 76% de los usuarios no pagan más de 3,25 euros la hora de ayuda a domicilio, y solo el 11% abona entre 7,44 y 9,30 euros. «Antes, el servicio se estaba dando sin tener en cuenta prácticamente las condiciones socioeconómicas de los usuarios».

No obstante, los otros tres grupos políticos, PSOE, IU y PREX-CREX (representados por Emilia Guijarro, Víctor Casco y Fernanda Ávila, respectivamente) asumieron las peticiones de la Plataforma: que se suspenda la subida, que se retire el Decreto 93/2012 de servicios sociales y que se inste a la Junta a que aporte los recursos económicos necesarios para que los ayuntamientos no tenga que acudir a esta subida de tasas para mantener el servicio. El de Cáceres perdió 300.000 euros y de ahí que aprobara la subida tan polémica.

Estos puntos tomarán cuerpo en una propuesta de impulso, que se debatiría próximamente en el parlamento extremeño.