Aparcar: misión casi imposible

ESTA semana será un poco más difícil encontrar un hueco libre para dejar el coche en el aparcamiento público del parque del Príncipe. La norma desde hace varias semanas es que la zona de estacionamiento esté llena a partir de las diez de la mañana. De esa hora en adelante, y hasta más allá del mediodía, hacerse con un espacio en el que dejar el vehículo olvidado durante unas horas es una tarea complicada.

Bien, pues la situación se complica esta semana. El motivo es lo que los técnicos en la materia denominan 'poda de limpieza', que consiste, en líneas generales y sin entrar en mayores profundidades, en sanear los árboles. O sea, cortar ramas excesivamente largas o caídas y adecentar el entorno. A la tarea se puso ayer la brigada de obras y jardines del Ayuntamiento de Cáceres, que tiene previsto continuar con estos trabajos hasta el viernes. En concreto, ayer estaban cerradas al paso de turismos, mediante vallas y cinta de seguridad, dos filas. En total, permanecieron inhabilitados en torno a medio centenar de aparcamientos (entre los legales, es decir, las plazas pintadas en el suelo, y aquellos otros en zonas de tierra que no están señaladas pero donde es habitual encontrar coches que no entorpecen el paso).

Lleno a las 10,00 horas

Esa merma en el número de espacios disponibles se hizo notar a lo largo de toda la mañana de ayer. El aparcamiento público al aire libre se llenó antes de lo habitual, de modo que a las diez no quedaba un solo sitio libre.

La ocupación total es nota distintiva desde hace meses, toda vez que el número de usuarios ha ido aumentado de modo significativo desde su apertura. La inauguración oficial fue el 27 de abril del año 2006, si bien ya era utilizado antes de la apertura a cargo de las autoridades. Dos años después de empezar a prestar servicio, el aparcamiento público al aire libre del parque del Príncipe se ha convertido en la principal alternativa de estacionamiento de vehículos para muchos cacereños que necesitan llegar al centro de la ciudad.

Tiene 210 plazas, está a cinco minutos andando del paseo de Cánovas. Esa ubicación céntrica es su principal reclamo, junto a otro muy apreciado: es gratis. Argumentos suficientes como para buscar un sitio en él, aunque esta semana cueste más que nunca.