Badajoz: punto de partida para los turistas

Conocer la ciudad y aprovechar para visitar pueblos de la provincia. Estos son los planes de la mayoría de los turistas que recibe Badajoz durante las vacaciones de Semana Santa. Los visitantes, en su mayoría españoles, suelen optar por fijar su estancia en un punto, en muchos casos la propia ciudad, y desde ahí desplazarse hasta otros enclaves como Zafra, Jerez de los Caballeros, Mérida, Olivenza o Cheles. El turismo monumental es el más habitual en estos días, ya que el buen tiempo acompaña y aún no hace un calor excesivo. La cercanía con Portugal es otro de los atractivos para los turistas porque les permite conocer también algunos pueblos del Alentejo, atrae a viajeros del país vecino e incluso hay quienes optan por hospedarse en Elvas. Desde el Jueves Santo por la mañana ya se podían ver por las calles del Casco Antiguo grupos de personas que, mapa y cámara de fotos en mano, recorrían la ciudad en busca de los mejores rincones pacenses. La oficina de turismo del pasaje de San Juan era el punto de partida para muchos, donde se les informaba de los museos que permanecían abiertos, se les recomendaba la visita a la Ermita de la Soledad o se les comentaba que la catedral permanecía cerrada al público. La Alcazaba y la Plaza Alta han sido los lugares más concurridos y fotografiados estos días. Precisamente en las inmediaciones de la Alcazaba estaban Emilio Sánchez y Lourdes Benítez, una joven pareja malagueña que eligió un hotel elvense para hospedarse. «Es una maravilla que Portugal esté tan cerca», comentaba Emilio, quien acudía hasta Extremadura para hacer la ruta de los Conquistadores. «Por ahora nos está gustando todo mucho y los pueblos están muy bien conservados», apuntaba esta pareja que no tenía mucha intención de acudir a ver las procesiones. Quienes sí pretendían ver alguna de ellas eran Rocío y Sebastián, unos onubenses de Valverde del Camino que visitaban por primera vez Badajoz tras haber pasado por Mérida. «Los monumentos están muy bien señalizados y los hoteles y restaurantes aquí tienen bastante calidad», subrayaba Rocío. Por su parte, María João Ferreira no había reservado plaza en ningún hotel pues su intención era visitar la ciudad y regresar a su ciudad, Lisboa, por la tarde. «He visto Badajoz por internet y me ha gustado bastante, por eso he venido para conocer la arquitectura, los monumentos y la propia ciudad. Aunque estemos en Semana Santa no me atraen demasiado las iglesias», destacaba esta lisboeta que acudía acompañada de su hija Rita. «A ver si tenemos tiempo para ver también algún museo», comentaban. A falta del balance oficial, la ciudad ha recibido numerosas visitas estos días, a pesar de que muchos de los atractivos turísticos aún permanecen en restauración o cerrados al público.