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CARLOS PINO
Martes, 25 de enero 2011, 19:24
Segunda muerte violenta en menos de una semana en la provincia de Badajoz. Si el pasado jueves un hombre perdía la vida tras sufrir varias heridas de arma blanca en su piso, ahora hay que lamentar otra víctima mortal en la localidad de Medellín.
Aquilino Avilés Ruiz, de unos 50 años, fue asesinado en torno a las once y media de la noche en su propia casa, el número 57 de la calle Cristóbal Colón. Se sospecha que a esa hora Aquilino Avilés abrió la puerta a su asesino y que éste le disparó dos o tres veces hasta que acabó con su vida. Cuando los sanitarios llegaron al domicilio no pudieron hacer nada por salvarle. El cadáver yacía con un disparo en el pecho. En la vivienda se encontraron marcas de otros tiros efectuados con un arma del calibre 22.
Sus hijas, de unos veinte años de edad, también estaban en la casa en el momento del crimen, por lo que podrían haber presenciado los hechos. Lograron huir ilesas escapando por la parte trasera de la vivienda. De ahí accedieron a casa de unos vecinos que en esos momentos ya estaban durmiendo y que no se habían enterado de lo que había pasado al otro lado de la pared.
Las hijas avisaron a los vecinos, que a su vez dieron la voz de alarma a la Guardia Civil y a los servicios de emergencia.
El cadáver fue levantado sobre las cinco de la madrugada y posteriormente trasladado al Instituto Anatómico Forense de Badajoz. Esta mañana efectivos de la Policía Científica han intentado recabar pruebas en el domicilio.
Una cinta de seguridad rodea la casa, un inmueble cuyo aspecto exterior es el de encontrarse en obras, si bien en su interior vivían el fallecido y varios miembros de la familia.
La familia del fallecido residía en Medellín desde hace un par de años y, según sus vecinos, procedían de la localidad pacensde de Acedera, aunque años atrás también habían vivido en la pedanía de Yelbes y en el mismo Medellín. Según los vecinos en la actualidad no trabaja y hace años su mujer tenía un puesto en el mercadillo.
Según fuentes conocedoras del caso, el fallecido tenía antecedentes penales por delitos contra la propiedad. La Guardia Civil maneja la hipótesis de que el móvil del asesinato no fue el robo. Todo parece indicar que el autor podría ser conocido de la víctima. Continúa la investigación para esclarecer el suceso.
El alcalde de Medellín, Antonio Parral, asegura que la localidad es tranquila y "nunca ha ocurrido un suceso como este por lo que la gente se encuentra conmocionada. Parral explica que en los dos años que la víctima vivía en el pueblo nunca había tenido ningún problema con nadie y que la Policía Local no ha detectado nunca ningún comportamiento fuera de lo normal por parte de este señor ni de su familia, ni se ha registrado ninguna denuncia en contra de él.
"Eran muy amables y me saludaba muchas veces", asegura José, uno de los vecinos de Aquilino, a quien en el barrio le conocían como 'Lito'. Afirma que Aquilino y sus familiares se llevaban bien con el resto de vecinos.
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