María del Pilar González Benavides, campeona absoluta de Extremadura

María del Pilar González Benavides, jugadora del Reino de Caissa de Badajoz, se proclamó el pasado domingo campeona absoluta de Extremadura de ajedrez en las instalaciones de la Federación Extremeña. La pacense, por tanto, será la representante regional en el Campeonato de España femenino, que se celebrará en la localidad jienense de Linares del 18 al 25 de agosto.

Vuelve así González Benavides a ostentar un título que ya obtuvo en 2010, cuando solo tenía 11 años, y recoge el testigo de la mano de su compañera de equipo y campeona en 2012, Ana Serrano Leiva, tercera clasificada en esta edición. Las dos son integrantes y referentes de la escuela pacense del club de ajedrez Reino de Caissa.

El torneo, organizado por la Federación Extremeña de Ajedrez, se ha disputado mediante el sistema de emparejamiento Round Robin que permite que jueguen todos los jugadores entre sí a un ritmo de 25' + 10''. Siete horas de lucha y quince partidas han mostrado el excelente nivel de las féminas extremeñas, que esta temporada han competido con éxito incluso en la liga en su categoría reina, la División de Honor.

El torneo estuvo presidido por la igualdad y por la combatividad. Solo una partida finalizó en tablas y llegando a posición de rey y torre contra rey y torre. A la última ronda llegaba con ventaja, gracias a su pleno de victorias, Marta Martín.

Podría haberse dado, incluso, un triple empate (con igualdad, además, en todos los desempates) entre Marta, Clara y Pilar pero finalmente tras las victorias de las dos jugadoras de Reino de Caissa lo que ocurrió fue un empate entre Marta y Pilar con los desempates a favor de la última (Berger y enfrentamiento directo). Otro empate se produjo entre tercera y cuarta, Ana Serrano y Clara Gallego.

La ganadora sufrió su única derrota en la primera ronda ante Clara Gallego aunque luego sumó cuatro victorias consecutivas que le dieron el título.

Las jugadoras mostraron un altísimo nivel ajedrecístico, con ajedrez dinámico, de ataque y arriesgado. Las partidas fueron emocionantísimas y se decidieron, en muchos casos, en los incrementos. Incluso se puede afirmar que Paola Molina, quinta, y Cristina Lancharro, sexta (ojo a esta promesa de 11 años de la escuela de Almendralejo que jugó un ajedrez de muchos quilates, llegando incluso a tener contra las cuerdas a la campeona), merecieron mucho más pues llegaron con opciones a todos los finales de partida.